La nota internacional de hoy es lo sucedido en España, tras el referéndum por la independencia de Catalunya (Cataluña).
Desde temprana hora de este domingo comenzaron a subir, vía redes sociales, los hechos (algunos sangrientos) que se vivían en esta región del suroriente hispano, ubicada en los límites con Andorra y Francia, sobre la costa mediterránea.
Mucho se habrá de escribir, comentar y hablar sobre este suceso que corona siglos de una lucha, a veces, sorda; otras, abierta, entre las regiones autónomas y el centro de España.
Lo inmediato de la jornada político-electoral, vía referéndum, hace que la noticia se convierta en la represión de las fuerzas hispanas del orden.
Lo trascendente vendrá en los días siguientes cuando todo el poder de negociación política de Mariano Rajoy, presidente del Gobierno Español, tendrá que explayarse para clarificar los hechos y su trascendencia de esta jornada dominical, parcialmente sangrienta.
Aunque la mayoría de la opinión pública estaría con los catalanes, comienzan a aparecer algunas notas discordantes que apuntan hacia un hecho disruptivo que estaría encadenado a los movimientos políticos sociales que se presentaron desde el año pasado en el mundo y que se sintetizan en dos hechos trascendentes: el Brexit inglés y la asunción de Trump a la Presidencia de los Estados Unidos.
