La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) aprobó a la Mixteca Alta de Oaxaca y a la Comarca Minera en Hidalgo como geoparques del mundo, informó José Luis Palacio, investigador del Instituto de Geografía de la Universidad Nacional Autónoma de México (Unam), durante el 5to. Encuentro con la Tierra que se llevó a cabo ayer a un costado del Kiosco Morisco, en la colonia Santa María la Ribera, en la Ciudad de México.
“Lo que sabemos es que las dos propuestas mexicanas que fueron presentadas en el mismo año ya han sido aceptadas, lo único que falta es la oficialización. Pero si ustedes revisan la parte de geoparques en la página de la Unesco ya aparecen los geoparques mexicanos incluidos entre los 130 que hay en el mundo. Los dos primeros en México, dos de los cuatro de toda América Latina y dos de los 130 del mundo, que además nos da mucho gusto que hayan sido aceptados después de un largo proceso, mismo que todo el tiempo estuvo asesorado por los Institutos de Geofísica y el de Geografía.
“Después de la evaluación inicial en la que se realiza un análisis del programa presentado, llegó una visita de dos expertos. Para el caso de México, vinieron un portugués y un español quienes durante una semana hicieron una valoración de campo y, posteriormente, un informe con sus opiniones, que luego fueron discutidas con un comité de geoparques de la Unesco. Este largo camino nos llevó desde noviembre hasta septiembre, mes en el cual se hizo una recomendación técnica que no fue pública y que estamos en espera para que en la 201 sesión del comité ejecutivo de la Unesco, que tendría verificativo en mayo, se oficialicen finalmente las propuestas de los nuevos geoparques en el mundo, en las que México ya está incluido”, señaló el exdirector del Instituto de Geografía de la Unam, institución que forma parte de la mesa directiva del Foro Consultivo Científico y Tecnológico (Fccyt).
El objetivo de los geoparques es dar a conocer el patrimonio geológico y la relación que existe con la sociedad. Estos sitios naturales iniciaron a finales del siglo pasado y se formalizaron con la creación de la primera red en Europa en el año 2000 con cuatro integrantes: España, Francia, Alemania y Grecia. A partir de 2004, es cuando se crea una red global y para 2015 esta iniciativa que ya era auspiciada por la Unesco se formalizó en el Programa Internacional de Ciencias de la Tierra y Geoparques.
“Los geoparques resultan fascinantes desde el punto de vista científico geológico, pero también educativo, porque las personas que van a ese lugar van a aprender cosas de ciencias de la tierra y de las comunidades que conforman el territorio (…). La experiencia es diferente en un geoparque porque es un turismo diferente el que se recibe, un turismo en el cual la gente va a aprender del paisaje, que está constituido principalmente por diferentes tipos de suelos, rocas y formas de relieve. No obstante, también se pueden encontrar monumentos virreinales y conventos dominicos del siglo XVI, entre otras cosas”, indicó el científico que pertenece al Sistema Nacional de Investigadores.
Durante el conversatorio denominado Los geoparques como modelo para la preservación del patrimonio geológico y el desarrollo comunitario, David Zamudio dijo que espera que a partir de la aprobación de la Unesco para los geoparques mexicanos, se desarrolle el conocimiento geológico en nuestro país.
“Ojalá que las autoridades que velan por la educación de los jóvenes de nuestro país, así como en el plan de estudios de primaria, secundaria y prepa que imparten clases de matemáticas y física, también puedan darle su valor a la geología”, apuntó Zamudio.
