Conservando la naturaleza mexicana

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Creado en 1997, el Fondo para Áreas Naturales Protegidas (Fanp) es un mecanismo que ha permitido el financiamiento de actividades de conservación en áreas naturales protegidas de México gracias a donativos del gobierno de nuestro país, Estados Unidos, el Banco Mundial y otros donantes nacionales e internacionales.

Luego de dos décadas de trabajo, el Fanp ha permitido la conservación en 51 áreas naturales protegidas de México y beneficiado a cerca de 30 mil personas mejorando su calidad de vida.

Lorenzo Rosenzweig, director general del Fondo Mexicano para la Conservación de la Naturaleza, recordó la historia de formación de la asociación civil que ha apoyado proyectos de conservación en Cofre de Perote, Cuatro Ciénegas, la Bahía de Loreto, el Tepozteco, el Archipiélago Espíritu Santo o Calakmul, por mencionar solo algunos.

“Hemos logrado una capitalización importante, apoyando casi mil 750 proyectos y entregado en campo, a través de nuestros socios, apoyos por casi 76 millones de dólares”, calculó.

Durante el festejo, realizado en un hotel de la Ciudad de México, Adriana Moreira, representante del Banco Mundial, recalcó que este organismo internacional ha apoyado con recursos al Fanp debido a que sus resultados han superado constantemente las expectativas, siendo un ejemplo para otras naciones del mundo.

“El estudio más reciente (2015) del impacto de inversión en áreas naturales protegidas destaca el caso mexicano. Los resultados indican que en la última década se ha reducido en 23 por ciento la deforestación en zonas apoyadas por el Fanp, en comparación con áreas que no han recibido apoyo. Esto es un hecho muy importante”, destacó la bióloga de origen brasileño.

Alejandro del Mazo, titular de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), recordó que los apoyos recibidos por el programa han permitido atender y preservar más de 30 especies en riesgo y de alto valor para la biodiversidad, entre las que destacó la mariposa monarca, el águila real, la ballena gris y el berrendo peninsular.

Tras reflexionar sobre el trabajo realizado hasta ahora, Lorenzo Rosenzweig estimó necesario que el Fondo vea más allá de las áreas protegidas y conectarlas con un sin número de espacios como corredores biológicos, buscar que las tierras privadas sean parte de la conservación e involucrar a más actores.

Rodolfo Lacy Tamayo, subsecretario de Planeación y Política Ambiental de la Secretaría de Medio Ambiente(Semarnat), enfatizó que el Fondo es parte de un proyecto nacional clave para la conservación del medio ambiente, sobre todo en los próximos 20 años, pues derivado del Acuerdo de París, las naciones tienen el reto de conservar el planeta que tenemos.

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