Ciudad de México, 9 de marzo de 2021.- La obesidad es uno de los principales problemas de salud en México que afecta a niños, jóvenes y adultos, que con el paso de los años desencadena enfermedades crónicas, como problemas cardiovasculares, hipertensión arterial y diabetes, entre otras más.
El sobrepeso y la obesidad se han convertido en un problema de salud pública en México. La última Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) dio a conocer que siete de cada 10 mexicanos adultos sufren de sobrepeso u obesidad. Este dato se corrobora con el que dio a conocer la Food and Agriculture Organization of the United Nations (FAO), según la cual, el 75% de la población adulta del país padece sobrepeso.
En el caso de los jóvenes, según la Ensanut, México es la región donde se concentran más jóvenes obesos del mundo, afectando a cuatro de cada diez adolescentes y a tres de cada diez niños. En términos generales, nos encontramos en segundo lugar a nivel mundial en términos de sobrepeso y obesidad.
La ciencia médica avanza en el desarrollo de alternativas seguras y diversos métodos científicos han demostrado su eficacia para combatir la pandemia de obesidad de manera efectiva como el Balón Intragástrico Ajustable Spatz, un método no invasivo, el cual mejora y facilita el proceso de colocación o retirada, logrando una mayor pérdida de peso para el paciente a diferencia de otros tratamientos tradicionales. Más de 100,000 pacientes han conseguido una pérdida de peso superior a los 18 kg en los primeros seis meses de tratamiento.
“Es importante señalar que la implantación del Balón Intragástico Ajustable a 12 meses en el cuerpo humano es un proceso integral que debe ir acompañado de tratamiento psicológico para eliminar los malos hábitos, realizar una actividad física tres veces por semana, limitar la ingesta energética procedente de la cantidad de grasa total y de azúcares, además de mantener una alimentación equilibrada, aumentando el consumo de frutas y verduras y evitar bebidas azucaradas y refrescos”, de acuerdo con Enrique Rentería, especialista en Cirugía Bariátrica Endoscópica
Rentería comentó que “la principal clave para combatir la obesidad y sobrepeso es el cambio de hábitos, si tenemos una costumbre de una buena alimentación desde niños, acompañado de una rutina de ejercicio y una alimentación saludable, se contrarrestará el consumo de comida chatarra y productos procesados que son accesibles para todas las personas y no brindan ningún aporte alimentario. Ante la nueva implementación del etiquetado en alimentos y bebidas es importante que las personas puedan ver lo que están consumiendo y seleccionen alimentos de mejor calidad que brinden mejor calidad nutricional para reducir el porcentaje de personas con sobrepeso”.
La Unicef destaca además que un etiquetado adecuado debe proporcionar información clara, veraz y de fácil comprensión tanto para adultos como niños, además de utilizar perfiles nutrimentales validados por expertos en la materia que defiendan intereses de salud pública y una alimentación saludable. El etiquetado propuesto “cumple precisamente con estas cualidades y debe ser implementado lo antes posible”.
El principal reto que enfrenta México es la malnutrición que, actualmente, se convierte en un problema que afecta a la salud del ser humano en cada etapa de su vida. Por un lado, afecta principalmente durante la infancia y tiene impactos que marcan por el resto de la vida, como tallas bajas y desarrollo insuficiente del sistema inmunológico.
Por tal motivo, especialistas recomiendan, elegir alimentos variados de todos los grupos, restringir o evitar el consumo de grasas presentes en alimentos como lácteos enteros, carnes con grasa, fiambres y embutidos, evitar el consumo de alimentos con alto contenido de azúcares refinados, evitar el consumo de bebidas alcohólicas, consumir suficiente agua segura y potable, evitar desayunos prolongados, realizar, al menos, cinco comidas principales y mantener un estilo de vida activo, realizando actividad física.
