Ciudad de México, 19 de febrero de 2020.- Hoy se cumplieron 14 años del accidente de Pasta de Conchos. Los familiares aún luchan por justicia, pero el ahora senador de la 4-T, Napoleón Gómez Urrutia, sigue lucrando con el recuerdo de los 65 mineros fallecidos, denunció Carlos Pavón Campos, secretario general del Sindicato Nacional Minero Metalúrgico Frente.
«En Pasta de Conchos hubo omisión, negligencia, cobardía por parte de Napoleón Gómez como dirigente sindical, y no es justo que ahora se diga preocupado por los mineros, cuando quienes por desgracia lo conocemos sabemos que nunca ha tenido el más mínimo respeto por la seguridad de los mineros «, subrayó.
El también diputado federal por el PRI, Carlos Pavón Campos, insistió en que Gómez Urrutia sigue lucrando con el dolor ajeno. «Es mentiroso, nunca se ha preocupado por la seguridad de los trabajadores, solo le interesa el bienestar económico propio y el de su familia».
Pavón Campos lamentó que haya senadores que respalden las ocurrencias de Napoleón Gómez, pues dijo, no tienen la más mínima idea de lo que en verdad sucedió en Pasta de Conchos ni de su cobarde proceder, antes, durante y después de la tragedia. Recordó que días antes del accidente, Napoleón Gómez, quien se jacta de ser líder sindical, sin conocer los trabajos de un minero, se negó a recibir una comisión proveniente de Pasta de Conchos.
«Buscaban respaldo del sindicato en materia de seguridad y nunca fueron oídos por él”. Si hubiera una investigación a fondo, expuso Pavón Campos, el hoy senador, iría a la cárcel por omisión en el caso de Pasta de Conchos, ya que como secretario general del sindicato tenía la obligación de saber sobre las condiciones de seguridad en esa mina.
Recordó que Napoleón se presentó en San Juan de Sabinas, Coahuila, tres días después de la tragedia, sin dar la cara a los familiares, y cuando le pidieron explicaciones claras sobre el rescate que se estaba planeado, intentó huir y cayó en el lodo.
«No supo qué decirles nada, en su desesperación, quiso correr, pero cayó en un charco de lodo, eso lo pueden ver en Internet. Desde entonces sigue sin dar la cara, y es una bajeza que siga utilizando el recuerdo de esos mineros, para lucrar», sostuvo.
Pavón Campos recordó que algunos de los mineros fallecidos pertenecían a una empresa de outsorcing denominada General de Hulla, y que por cada trabajador tercero, Napoleón llegó a cobrar diariamente el siete por ciento sobre un salario de 300 pesos de cada trabajador.
Además, cobraba 13 mil pesos anuales por cada trabajador subcontratado. «Las mentiras, el doble discurso de Napoleón tiene cansado a los mineros, habrá algunos ilusos que se traguen sus mentiras y esos no somos los mineros, a nosotros no nos engaña, sabemos quién es, conocemos su pasado, su manera de levantar cortinas de humo, la forma en que se ha enriquecido, sus omisiones y negligencias en Pasta de Conchos», sostuvo.
Barroterán, una tragedia olvidada
Carlos Pavón Campos cuestionó que otros accidentes mineros no sean recordados como ocurre con Pasta de Conchos, como es el caso de la mina en Barroterán, en Coahuila, donde murieron 153 mineros el 31 de marzo de 1969.
«Esa tragedia sacudió a todo el mundo, por la magnitud, el número de mineros fallecidos, y ahora está en el olvido. Pregúntele a Napoleón ¿qué sabe de esa tragedia?, y la respuesta será que no sabe nada, por la sencilla razón de que no le significa nada políticamente. Nosotros en el Frente sí recordamos y guardamos luto por la tragedia de Barroteran», afirmó.
