Monterrey, Nuevo León, 23 de junio de 2021.- El Tecnológico de Monterrey, en conjunto con la Universidad de los Andes de Colombia, lanzaron, por segundo año consecutivo, la convocatoria para participar en el TPrize. Esta iniciativa de innovación abierta tiene el objetivo de aportar soluciones a los desafíos educativos que enfrenta América Latina y El Caribe. Los participantes deberán postularse con soluciones de innovación en las que ya se encuentren trabajando, al menos en etapas piloto, para que la población marginada de esta región pueda desarrollar las habilidades necesarias que los acerquen a buenos trabajos, mejores oportunidades y bienestar general.
Para el lanzamiento se llevó a cabo un panel de discusión en el que Silvia Restrepo, vicerrectora de investigación y creación de la Universidad de los Andes; Mónica Flores, presidenta de Manpower Group Latinoamérica; Javier González, director de Summa, y José Escamilla, director asociado del Instituto para el Futuro de la Educación del Tecnológico de Monterrey, conversaron sobre la importancia de repensar las metodologías de enseñanza para permitir al individuo explorar su creatividad, adaptarse e innovar para buscar nuevos paradigmas educativos.
El Covid-19 amplificó las desigualdades existentes en América Latina en términos socioeconómicos, raciales, de acceso digital y de género. Estas problemáticas se suman a los más de 165 millones de estudiantes que no pudieron asistir a la escuela y los más de 26 millones de empleos que se perdieron en la región. “Estamos en una situación de urgencia. Este año vamos a continuar enfocando nuestros esfuerzos en buscar soluciones que acorten la brecha de habilidades para el trabajo en América Latina”, expresó Sabrina Seltzer, directora de TPrize.
TPrize convoca a la comunidad de innovadores a buscar soluciones tecnológicas en América Latina y el Caribe para:
1. Proponer a docentes e instituciones prácticas para el desarrollo de las habilidades del futuro en los estudiantes.
2. Diseñar modelos educativos para contextos de poca conectividad.
3. Promover la evaluación y reconocimiento de habilidades desarrolladas fuera del sistema educativo formal.
4. Ofrecer formación flexible en habilidades duras y blandas que preparen a los estudiantes para el trabajo del futuro.
Las mejores soluciones entrarán a un programa de acompañamiento de 2 años y recibirán apoyo de la comunidad conformada por la red de estas universidades y de sus socios para potenciar y pilotear sus propuestas en las comunidades objetivo del programa. Ahora más que nunca, se necesitan soluciones que impulsen la innovación y aprovechen la tecnología desarrollando el potencial de las personas para aprender y obtener buenos trabajos en un mundo que no para de transformarse.
