Ciudad de México, 17 de mayo de 2019.- Bien lo dice el doctor en Física Matemática por la Universidad Estatal Lomonósov de Moscú, Rusia, y director de la Academia Nacional de Matemáticas, Romeo Pérez Ortiz, que el panorama de la educación es preocupante y, hasta el momento, las diferentes autoridades e instituciones oficiales no tienen una propuesta seria para atacar este problema.
También, afirma -La Crónica de Chihuahua, 27 de abril, 2019- que todas las reformas educativas han sido ineficientes por la falta de un diagnóstico correcto en la problemática educativa y por los pocos recursos destinados a solucionarla.
En igual dirección, la Federación Nacional de Estudiantes Revolucionarios “Rafael Ramírez” (Fnerrr), en coordinación con el Centro Mexicano de Estudios Económicos y Sociales (Cmees) y Antorcha Magisterial, al dar a conocer la realización de la VII Espartaqueada Nacional de Matemáticas -un concurso académico que impulsa dicha disciplina en el país-, demandaron al gobierno federal no disminuir más los presupuestos a la educación y las ciencias, en lugar de otorgar becas o tarjetas –de dinero- que para nada vienen a resolver el problema educativo en México.
En rueda de prensa, Isaías Chanona Hernández, líder de la Fnerrr; Alejandro Rojas Romero, de Antorcha Magisterial, y Romeo Pérez Ortiz, de Cmees, expusieron que esta VII Espartaqueada -al igual que las anteriores seis-, busca aportar conocimiento a los estratos más pobres del país porque es un esfuerzo de los organizadores para mejorar e impulsar el nivel de las matemáticas en México.
Señalaron que ante la urgencia de elevar el nivel educativo en las matemáticas y las ciencias en general, cobra relevancia la Espartaqueada Nacional de Matemáticas, organizada anualmente por las organizaciones citadas, al realizar un gran esfuerzo conjunto para que los estudiantes lleguen a comprender que las matemáticas están en todas partes.
Al respecto, a una pregunta de este reportero, Chanona Hernández aseguró que este evento incentiva la visión humanista de la ciencia entre los participantes, dado que las matemáticas, como otras disciplinas, son utilizadas a beneficio de unos pocos.
Refirió que esta jornada de matemáticas está pensada para invitar a todos los jóvenes y maestros en esta categoría, pero sobre todo darles la oportunidad a los estudiantes que no tienen la posibilidad de ingresar a los reducidos concursos de matemáticos que todavía hay en el país.
“Sí, hay otras competencias como la olimpiada nacional de matemáticas, pero son grupos muy cerrados, a donde no llegan las convocatorias a las comunidades, a las colonias, a la gente más humilde que también tiene todo el potencial y toda la capacidad para poder asistir a estos eventos”, señaló.
Lamentó que, desafortunadamente, no tengan acceso estos jóvenes porque no hay un fomento para las matemáticas como debiera serlo y debiera estar en un plan o programa de estudios, para poder catapultar a estos estudiantes a otro nivel y, por lo tanto, que México pueda competir a nivel mundial con un alto valor agregado.
En Mexico, agregó, no se invierte en este tipo de proyectos e incluso, hoy, al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), le recortaron el presupuesto cuando la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) ha establecido que se debe de invertir mínimamente el 8 por ciento del PIB en educación y no menos del 1 por ciento en investigación científica. Entonces, esta es la parte humanista en donde nosotros, los organizadores, incluimos a los hijos del pueblo, del trabajador, a los maestros, al espíritu de nuestra Espartaqueada de matemáticas, indicó.
“Por eso –puntualizó-, nosotros con mucha alegría, estamos anunciando nuestra séptima Espartaqueada ininterrumpida y con bastante éxito al reunir a más de 5 mil estudiantes y maestros, que estén destacando en matemáticas y que, sepan que año con año, hay un evento de esta naturaleza y que, además, va creciendo la edición en calidad, en cantidad y, sobre todo, que, estamos seguros, es una aportación muy importante a nuestro país que, de otro modo no se estaría haciendo. Esta es la importancia de la Espartaqueada y de la participación de los organismos responsables de su organización “, subrayó.
Informó que la Espartaqueada Nacional de Matemáticas es un esfuerzo para mejorar e impulsar su nivel en México y que el concurso ha cumplido su objetivo, pues ha fomentado las matemáticas entre los estudiantes y maestros, por lo que continuarán con este y demás proyectos que la federación tiene en el ámbito cultural y educativo para aportar en el mejoramiento de la sociedad.
Dijo que como se observa en el informe Panorama de la educación 2018, elaborado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), México es el país que menos invierte en sus estudiantes pues ocupa el penúltimo lugar de 34 países que integran la organización en el área de matemáticas.
Ninis… ¿?
En respuesta a otra pregunta de este reportero, Chanona Hernández dijo: “Nosotros creemos que el hecho de dar tarjetas –de dinero- no viene a resolver el problema educativo. Anteriormente, las familias eran beneficiadas con algún tipo de programa social donde, si no resolvía el problema completamente, en algo ayudaba aminorar esa pobreza, esa miseria, en la que todavía se encuentran millones de mexicanos.
“Hemos visto en lo que va de este sexenio, que se han hecho muchos recortes presupuestales entre ellos el ramo 33 donde veíamos que era una partida muy importante para la educación, para infraestructura en salud, para espacios deportivos y culturales, para a las mismas construcciones de aulas y demás, como electrificación, drenaje y ahora, ya no existen esos proyectos para beneficio colectivo y beneficio social “, lamentó.
También, criticó el hecho de quitar recursos y hacer otros recortes en educación, en salud, etcétera, para poder dar becas –tarjetas de dinero-, que nosotros creemos que pueden ser necesarias, pero mal enfocadas.
“En el caso de los ninis, se supone que son más de 9.5 millones y, en la primera parte, digamos, estas becas iban a beneficiar a más de 2.5 millones, en su primera fase. Y, resulta que ahora solamente se está beneficiando a 1.5 millón y que, claro, para poner a trabajar a la gente, está de por medio un año de capacitación -de algún oficio-, pero el problema es ¿en dónde van a trabajar, después…?, inquirió.
Consideró que está bien de mandarlos a capacitar con un herrero, con un panadero o con un carpintero, por ejemplo, y… ¿después, en dónde va a trabajar esa gente pues no está completo ese proyecto… ¿Agregó que, en el caso de los bachilleratos, se está invirtiendo algún recurso, de nivel medio superior con una beca… Pero no es universal… porque los jóvenes que estudian en escuelas particulares no es porque ellos quieran, sino porque no tuvieron otra opción al estar fuera de la inscripción a una universidad pública.
“Es la opción que les ha dejado el estado, al rechazarlos de las universidades, de las preparatorias de la Unam, del IPN, por ejemplo y que no tuvieron ninguna posibilidad de ingresar y aunque no tengan los recursos se van a una escuela particular para poder seguir estudiando. Y, no porque tengan para pagar, al contrario, son los que más necesitan del apoyo y, otro problema, es que no están llegando las becas, ni para estudiantes ni para ninis “, refirió.
En cuanto a la deserción escolar, por ejemplo, explicó que se ha dado porque le dan 800 pesos a un joven que viene de provincia, de Chiapas, Veracruz, Oaxaca u otros estados de la república a estudiar a la Ciudad de México.
Ese dinero –aseguró- sólo le servirá para el transporte y ¿para la alimentación, la renta los útiles escolares pues, prácticamente este recurso consideramos debe invertirse más en infraestructura y darles apoyos sociales a las mismas universidades.
Es decir, crear infraestructura dentro de las universidades y, sobre todo, crear un plan de estudio, un programa de estudio que contemple particularidades de los diferentes estudiantes. No es lo mismo un joven que viene del interior de la república, de una comunidad marginada económicamente, a un estudiante que está en la capital o en la zona urbana pues las condiciones de vida son completamente diferentes.
“Nosotros creemos que mientras no se piense en un modelo educativos donde se contemple la participación de los maestros, de gente calificada y que se contemple un proyecto de nación en donde la educación sea un motor fundamental para el desarrollo económico, político y cultural, la situación en México no va a cambiar por más reformas que se hagan o que se le dé vuelta a la misma reforma educativa, o que se le quite o se le ponga, ya que mientras no se toquen los problemas fundamentales: infraestructura, cobertura y calidad educativa, por ejemplo, el asunto no va a cambiar“, subrayó.
La VII Espartaqueada Nacional de Matemáticas, un concurso académico que impulsa dicha disciplina en México, se realizará los días 18 y 19 de mayo con una participación de 600 estudiantes de todo el país que buscarán ser los mejores en matemáticas en la etapa final.
Antes, entre el 25 de abril y el 8 de mayo, se realizaron las fases estatales del concurso, el cual reunió a unos 5 mil estudiantes -jóvenes de nivel secundaria, medio superior, superior- y maestros y, este fin de semana, se concentrarán en el municipio de Tecomatlán, Puebla, La Atenas de la Mixteca, los ganadores estatales de las diversas categorías que demostrarán sus capacidades en la disciplina.
Por último, se subrayó que las matemáticas son sumamente indispensables para el pensamiento del individuo, puesto que el pensamiento matemático es lo que al individuo le permite colocarse en la posibilidad de resolver los graves problemas que aquejan a nuestro país.
Además, no existe ninguna persona que pueda decir que las matemáticas no son necesarias ya que las matemáticas son aplicarles en cualquier momento de nuestra vida. Conocemos perfectamente la problemática de los estudiantes y la Fnerrr afirma que el problema de que a los estudiantes no les agrade esta materia es porque, en verdad, no tienen las condiciones necesarias para desarrollarse más en este ámbito y, por ello, Fnerr lucha por mejores condiciones de infraestructura y así elevar los conocimientos de los estudiantes.
