“Vamos por una política justa y la corrupción se termina y será parte del esfuerzo para recuperar la integridad en la Secretaria de Agricultura (Sagarpa), a través del ejemplo”, enfatizó el próximo titular de esta dependencia, Víctor Manuel Villalobos Arámbula.
El virtual secretario de Agricultura de la Administración Federal de Andrés Manuel López Obrador, a parir del 1 de diciembre, indicó que la relación con organizaciones campesinas “la vemos como componente importante en organizar a los productores, además de mantener los precios de garantía para pequeños y muy pequeños productores de granos a fin de aumentar las cosechas en dos o tres ciclos agrícolas”, apuntó.
Villalobos aseguró que el gobierno de López Obrador garantizará apoyos para productores de maíz a fin de que compitan con sus homólogos estadounidenses que son altamente subsidiados por su gobierno, pues de lo que se trata es que dejen de ser productores de subsistencia y obtengan utilidades al término de cada ciclo agrícola.
En tanto, el coordinador general del Congreso Agrario Permanente (CAP), José Luis González Aguilera, coincidió con Villalobos Arámbula en la urgencia de acabar con la corrupción de funcionarios en la Secretaría de Agricultura (Sagarpa), en destinar los recursos directos a los productores y en priorizar la representatividad productiva de las organizaciones campesinas del país.
En esta primera reunión pública entre el próximo encargado de la política agropecuaria del país y el CAP, Villalobos expuso que el destino del presupuesto será focalizado a los pequeños y medianos productores mientras que González Aguilera propuso una depuración del padrón de organizaciones que integran el Consejo Mexicano para el Desarrollo Rural Sustentable.
Organizaciones campesinas nacionales, entidades de interés público
González Aguilera propuso a Villalobos elevar al rango de “entidades de interés público” a las organizaciones campesinas que tengan categoría nacional para que accedan a los recursos públicos del gobierno federal.
La propuesta anterior es una idea que González Aguilera expone desde años atrás, a través de la organización campesina que preside: Unión General de Obreros y Campesinos de México “Jacinto López” (Ugocm-JL), uno de los diez organismos político agrarios fundadores del CAP.
Dicha moción sanearía el espectro campesino que, actualmente, lo integran hasta unas 150 organizaciones, muchas de las cuales son sólo Asociaciones Civiles y carecen de representación nacional, al crearse con sólo 6 u 8 integrantes, pero cuya figura social les permite acceder a los recursos financieros.
González Aguilera propuso que tengan un mínimo de 60 mil agremiados y cuenten con representación en, por lo menos, 17, de las 32 entidades federativas, para que puedan integrarse al Consejo mexicano para el Desarrollo Rural Sustentable, de la Sagarpa, y con ello, ser sujetos de apoyo financieros para sus actividades gremiales.
Igualmente, consideró necesario que, a semejanza de los sindicatos obreros, la base del sostenimiento de las organizaciones gremiales sea a través de cuotas que aporten sus afiliados.
La presente administración pública federal hizo un intento en el sentido de eliminar algunas organizaciones campesinas que carecieran de representación nacional, pero no se registraron avances en esa dirección.
González Aguilera precisó que la visión de Sagarpa de apoyar a los productores es positivo porque la idea es “ir por el rescate del campo y que los subsidios que maneja Aserca, que son cerca de 18 mil millones de pesos, se distribuyan equitativamente y como dice: es hora del sur-sureste”.
Declaró que la distribución del Presupuesto de Egresos debe ir a quienes tienen más necesidad porque “si los recursos son para los campesinos que les llegue, que ninguna organización los rasure, porque no es justo que les quiten recursos estratosféricos a los proyectos como el 50 por ciento”. Por ello, dijo, el reclamo “justo” de Andrés Manuel López Obrador y del próximo secretario, Víctor Manuel Villalobos, es que los recursos lleguen al campo.
