Cuando Hamze “Leo” Sukkar dejó Siria debido a los conflictos en ese país esperaba sentirse fuera de lugar y extrañando su hogar al inscribirse en el Instituto Tecnológico de Illinois, en Chicago, más bien se halló calurosamente acogido por los estudiantes los profesores y el personal.
“La comunidad aquí era tan diversa que yo no sobresalía”, dice Sukkar, de 22 años, estudiante de ingeniería informática y gestión que actualmente es presidente del cuerpo estudiantil.
Illinois Tech ha estado en la vanguardia de los esfuerzos de las universidades de Estados Unidos para ayudar a estudiantes de Siria. Trabajando con la organización de expatriados sin fines de lucro denominada Jusoor, el Instituto de Educación Internacional y la red del Departamento de Estado de Estados Unidos EducationUSA, Illinois Tech ha concedido becas desde el año 2012 a más de 40 estudiantes sirios.
Más de 60 universidades en Estados Unidos, Canadá y Europa pertenecen al Consorcio de Siria para la Educación Superior en Crisis, que es parte del instituto. En conjunto han proporcionado becas a más de 300 estudiantes para cubrir el costo de la matrícula y ayuda para pagar gastos de manutención para 65 estudiantes.
A Suhaib Ibrahim, de 27 años de edad, le quedaba un año para lograr su título en ingeniería en la Universidad de Damasco, cuando tuvo que escapar en 2012. Dado que Illinois Tech le aceptó varios de sus cursos pudo graduarse en 13 meses y consiguió empleo en una empresa de ingeniería de transportes.
“Casi no hay palabras para describir la cantidad de ayuda y asesoramiento que nos han proporcionado”, dice Ibrahim, que edita el blog Sirios por un mejor futuro. “Al principio no podía entender por qué esta gente lo hacía. Es algo que va más allá de la imaginación”.
Las necesidad de que más instituciones de América del Norte, Europa y de otros lugares se ofrezcan es grande porque la crisis en Siria ha interrumpido la educación de, al menos, 100,000 estudiantes universitarios, según el Instituto de Educación Internacional.
Ayuda financiera para mujeres sirias
Para las mujeres ha sido particularmente difícil recomenzar sus estudios fuera de Siria. Jusoor y el instituto hace poco eligieron a las primeras 18 seleccionadas para recibir la beca de la organización 100 Mujeres Sirias, 10,000 Vidas Sirias.
Maya Alkateb-Chami, directora de Jusoor, dice que las estudiantes mujeres ahora están inscritas en Harvard, Brown, Northeastern, Universidad de Nueva York y en otras universidades. Ella elogia lo que otras instituciones más pequeñas, como Illinois Tech, el Colegio Universitario Monmouth y la Universidad de Evansville han hecho.
A pesar de la mucha buena voluntad es difícil para muchas universidades de Estados Unidos eximir el pago de la matrícula para estudiantes sirios, dice Alkateb-Chami. “Yo quiero darle mi reconocimiento a todas las que lo han hecho posible”, dijo.
