Ciudad de México, 1 de septiembre de 2021.- Con el propósito de atender a la población de 0 a 6 años de edad que presenten riesgo, daño o secuelas perinatales de parálisis cerebral, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, a través de su brazo humanitario de Servicios Caritativos, donaron el equipo médico necesario para la habilitación de la Sala de Diagnóstico Oportuno de la Asociación Pro Personas con Parálisis Cerebral (Apac), por un monto de más de $252,452 pesos mexicanos.
Apac es una institución de asistencia privada (IAP) que se encarga de brindar atención especializada a personas con parálisis cerebral. Durante su labor, se ha ocupado de informar sobre la importancia de la prevención y atención temprana, realizando alianzas con diversos hospitales para canalizar a bebés que, por circunstancias del curso del embarazo o condiciones del nacimiento, llevan consigo un riesgo de desarrollar discapacidad.
De acuerdo con la Asociación, a nivel mundial la detección de parálisis cerebral se da hasta los 7 años de edad; sin embargo, gracias a sus especialistas y equipo médico, esta problemática se puede diagnosticar desde las 4 o 6 semanas de nacimiento, siempre y cuando se dé seguimiento al neurodesarrollo de los pequeños, con la finalidad de prevenir o minimizar las consecuencias de los daños cerebrales.
Según el Estudio del Recién Nacido de Riesgo Neurológico de Ramón Sánchez, en la edad pediátrica un 10% de los niños presentaron una deficiencia o alteración en su desarrollo; de ahí la importancia de detectar los signos de alarma que señalan que un bebé puede desarrollar una discapacidad. El estudio también señala que la asfixia perinatal es una deficiencia que, pese a los avances de la neonatología y perinatología, persiste como problema, indicando que esta enfermedad afecta de 2 a 4 por cada 1,000 nacidos y al 60% en los casos de los recién nacidos pretérmino.
“Debido a que, cada año, se registran 12 mil nacimientos con parálisis cerebral, la práctica clínica de los médicos especialistas de Apac se ven en la necesidad constante de contar con el equipo transdisciplinario especializado para lograr diagnosticar a bebés desde las pocas semanas de nacidos y dar seguimiento a su neurodesarrollo. Es por ello que La Iglesia donó a Apac el equipo médico para apoyar a su causa”, mencionó Elder Ranulfo Cervantes, setenta de Área de La Iglesia de Jesucristo.
Con cerca de 20 tipos de equipos e instrumentos médicos, los cuales se calcula que tendrán una vida útil de 20 años, se espera que a lo largo de todo este tiempo se ayude a cerca de 16 mil niñas y niños que sin importar la parte del país en la que se encuentren, pueden acudir a la Sala de Diagnóstico Oportuno y ser atendidos.
Guadalupe Maldonado, directora general de Apac, declaró que “Con este equipo estaremos habilitando la Sala de Diagnóstico Oportuno para atender a niños con factores de riesgo y signos de alarma de daño neurológico con posibilidades de tener secuelas condicionantes de discapacidad, pero que si se atiende a tiempo, se pueden reducir o incluso revertir. Un diagnóstico oportuno cambia vidas y eso es lo que la Iglesia de Jesucristo ha hecho por Apac”.
Para concluir, el representante de la Iglesia añadió que “es un privilegio ser testigo de la gran labor que lleva a cabo Apac, la cual busca servir a personas con parálisis cerebral y otras discapacidades afines y de elevar su calidad de vida a través de servicios de rehabilitación, salud y educación con los que cuentan. Para nosotros, colaborar con estos esfuerzos, significa seguir el valor fundamental de la Iglesia de Jesucristo de ayudar a los necesitados. Como ciudadanos en esta comunidad, actuamos para poder superar los desafíos que enfrenta la humanidad y ver un futuro mejor para todas las familias mexicanas a través de la colaboración con organizaciones como Apac”, finalizó.
