Análisis escrito por Dr. Joseph Mercola*
Datos comprobados
La vitamina D alguna vez fue considerada como un nutriente importante para la salud ósea, pero ahora se sabe que esta hormona esteroide puede influir en prácticamente todas las células de su cuerpo, incluyendo a las del cerebro. Aparte de influir en la salud física, la vitamina D desempeña un rol en la salud mental y puede influir en el comportamiento, incluso años después.
Como tal, también es importante garantizar que los niveles de vitamina D de los niños estén optimizados, ya que una deficiencia durante la infancia puede afectar el comportamiento en la adolescencia, según un estudio de la Universidad de Michigan.
Bajos niveles de vitamina D, durante la infancia, relacionados con problemas de comportamiento en años posteriores
En el estudio participaron 273 niños en edad escolar entre las edades de 5 y 12 años, que viven en Bogotá, Colombia, quienes formaron parte de un estudio de cohorte más amplio que comenzó en 2006 e incluyó entrevistas de seguimiento realizadas después de seis años. Parte de las entrevistas evaluó el comportamiento de los niños y los investigadores también verificaron los niveles de vitamina D de los niños a través de muestras sanguíneas que se recolectaron al inicio del estudio.
Se encontró que el 10.3% de los niños tenían deficiencia de vitamina D, definido como un nivel de vitamina D inferior a 20 ng/ml (o 50 nmol/L). Además, quienes tenían deficiencia al comienzo del estudio tenían 1.8 veces más probabilidad de exhibir problemas de conducta en la infancia posterior, cuando tenían entre las edades de 11 a 18 años.
«Al parecer, los niños que tenían deficiencia de vitamina D durante sus años de escuela primaria obtuvieron puntuaciones más altas en las pruebas que miden los problemas de comportamiento cuando llegaron a la adolescencia», dijo en un comunicado de prensa, Eduardo Villamor, profesor de epidemiología de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Michigan.
Esto incluye más problemas de «externalización», como los comportamientos agresivos y de incumplimiento de reglas. Los bajos niveles de proteína unida a la vitamina D, que transporta la vitamina D en la sangre, también se relacionaron con el comportamiento agresivo, síntomas de ansiedad y estado de ánimo depresivo, en comparación con los niveles más altos.
Conexión de vitamina D con problemas emocionales y de comportamiento
En 2017, se publicó una investigación independiente que también relacionaba la vitamina D con problemas emocionales y de comportamiento en adolescentes. En un análisis de 9,068 participantes, el nivel más bajo de vitamina D se relacionó con un aumento en los problemas emocionales, problemas de relación con los compañeros y dificultades de comportamiento entre los niños. Además, un ligero aumento en los niveles de vitamina D (10 ng/mL en los niños y 10.2 ng/mL en las niñas) se relacionó con una disminución en el total de las dificultades de comprtamiento.
“Según el estudio transversal a gran escala en una muestra de niños y adolescentes basada en la población alemana, detectamos relaciones inversas entre las concentraciones de 25 (OH) D [vitamina D] y los puntajes SDQ autocalificados y en los padres de la escala total de dificultades y diferentes subescalas con la asociación más fuerte en la submuestra de edad ≥12- <18 años para ambos sexos», explicaron los investigadores.
El cerebro humano cuenta con receptores de vitamina D, lo que sugiere la importancia de ella para la salud mental y emocional
Se cree que la vitamina D regula más de 200 genes diferentes al unirse a los receptores de vitamina D, que son responsables de impulsar diversos procesos biológicos. De hecho, los bajos niveles de vitamina D se han relacionado con diversos trastornos psicológicos, como ansiedad, depresión y esquizofrenia. Es probable que influya en la salud psicológica de varias maneras, incluso a través de modular la inflamación, regular las proteínas que combaten los radicales libres y promover la síntesis del factor neurotrófico derivado del cerebro, que puede desempeñar un papel en la esquizofrenia.
En conjunto, la vitamina D desempeña un rol neuroprotector en el cerebro. La Dra. Joy Weydert, del departamento de pediatría del Centro Médico de la Universidad de Kansas, escribió para la revista Children y explicó: «La vitamina D activada también tiene efectos neuroprotectores a través de la neuromodulación, propiedades antiinflamatorias, antiisquémicas y antioxidantes. Tener niveles adecuados de vitamina D en el útero y durante las etapas tempranas de la vida asegura una actividad transcripcional del receptor normal vital para el desarrollo del cerebro y funcionamiento mental.
La vitamina D puede influir en las proteínas directamente involucradas en el aprendizaje, memoria, control motor y comportamiento social y está estrechamente relacionada con el funcionamiento ejecutivo; por ejemplo, el comportamiento enfocado en objetivos, atención y adaptabilidad al cambio».
Deficiencia de vitamina D en el útero puede dañar al cerebro
Obtener suficiente vitamina D, a través de una prudente exposición a los rayos del sol o suplementación es una de las estrategias más directas que puede utilizar para proteger la salud mental, y esto ocurre incluso en el útero. En un estudio, los niños con deficiencia de vitamina D al nacer tenían un riesgo 44% mayor de desarrollar esquizofrenia en la adultez.
«La falta de vitamina D durante el desarrollo cerebral puede alterar diversos resultados, incluyendo el volumen del cerebro, neuroquímica, expresión de genes y proteínas, así como en el comportamiento», explicaron los investigadores. Weydert agregó: “Los estudios han comenzado a revelar los efectos neurohormonales de la vitamina D en el desarrollo y comportamiento del cerebro, con una conexión con los trastornos de salud mental. Muchos de estos efectos comienzan mucho antes del nacimiento del niño, por lo que es importante que las mujeres embarazadas sean evaluadas para determinar su nivel de vitamina D y suplementarla para obtener el mejor resultado de salud posible en los niños».
Junto con los problemas de comportamiento y esquizofrenia, existen otros problemas de salud mental relacionados con la deficiencia de vitamina D, que incluyen a la depresión, trastorno estacional efectivo y autismo. En el caso de la depresión, Weydert explicó, «la deficiencia de vitamina D disminuye la expresión de la enzima catecol-O-metil transferasa (Comt), necesaria para el metabolismo de la dopamina y serotonina». Los adolescentes con deficiencia de vitamina D mejoraron sus síntomas depresivos después de recibir la suplementación con vitamina D.
¿Cuál es la dosis ideal de vitamina D?
El nivel deseado es entre 60 y 80 ng/mL, mientras que 40 ng/mL es suficiente para prevenir una amplia variedad de enfermedades, incluyendo al cáncer. Sin embargo, como señaló Weydert, «las dosis recomendadas actuales de suplementos de vitamina D no son suficientes para cumplir con los niveles séricos ideales».
La investigación sugiere que se necesitarían 9,600 UIs de vitamina D al día para lograr que el 97.5% de la población alcance los 40 ng/mL, pero los requisitos individuales pueden variar ampliamente; es necesario que evalúe sus niveles para determinar la dosis correcta que necesita para alcanzar los niveles adecuados. La exposición regular al sol es una manera ideal de optimizar los niveles de vitamina D (además de obtener otros beneficios de la exposición solar), pero muchas personas experimentan dificultades para exponerse al sol, ya sea por el trabajo en interiores, el clima o las limitaciones físicas. Como tal, muchas personas necesitan consumir un suplemento oral de vitamina D3, especialmente durante el invierno.
La única forma de evaluar si es posible que necesite añadir un suplemento, así como la cantidad, es por medio de una prueba, la cual debe realizar a principios de la primavera, y principios del otoño cuando los niveles se encuentran en su punto más alto y más bajo.
GrassrootsHealth ofrece estas pruebas por medio de un kit de prueba de vitamina D como parte de su investigación patrocinada por los consumidores. Con esta suscripción se apoya esta investigación que puede ayudar a millones de personas en los próximos años. (Todos los ingresos de estos kits van directamente a GrassrootsHealth. No obtengo ningún beneficio de estos kits, únicamente proporciono esta información como un servicio de conveniencia para mis lectores).
GrassrootsHeallth también trabaja para poner fin a la deficiencia de vitamina D en niños y mujeres embarazadas y cree que debe implementarse un nuevo estándar de atención para las mujeres embarazadas que incluya pruebas de vitamina D tres veces durante el embarazo y mantener niveles sanguíneos de 40 a 60 ng/mL.
Aunque tales pruebas aún no están tan extendidas puede solicitar un análisis de sangre de vitamina D a su proveedor de atención médica o, si es una mujer que tiene entre 12 y 17 semanas de embarazo, puede inscribirse en el proyecto Protect Our Children Now! de GrassrootsHealth (el sitio de GrassrootsHealth está disponible sólo en inglés).
Deficiencia de vitamina D, un tema preocupante
A menudo, la deficiencia de vitamina D se define como tener un nivel sérico (en sangre) de vitamina D inferior a 20 ng/mL. Con estos parámetros, el 40% de la población de los Estados Unidos podría tener deficiencia de vitamina D. Sin embargo, para proteger su salud, cualquier nivel inferior a 40 ng/mL (100 nmol/L) debe considerarse como deficiente.
Por ejemplo, la investigación ha demostrado que una vez que alcanza un nivel mínimo de 40 ng/mL de vitamina D en suero, su riesgo de cáncer disminuye en un 67%, en comparación con tener un nivel de 20 ng/mL o inferior. Si el límite de deficiencia se elevara entre 40 y 60 ng/mL, se dispararían las tasas de deficiencia de vitamina D en los Estados Unidos. Incluso si se utilizan 20 ng/mL, la deficiencia de vitamina D en niños es «muy común», y tanto los niños, como los adultos, deben exponerse de forma regular a los rayos del sol o tomar suplementos de vitamina D3 para garantizar que sus niveles estén en el rango óptimo.
Es importante tomar en consideración que los suplementos de vitamina D deben equilibrarse con otros nutrientes; es decir, con la vitamina K2 (para evitar complicaciones relacionadas con la calcificación excesiva en las arterias), calcio y magnesio.
Es crucial optimizar la vitamina D para promover la salud general
El hallazgo de tener deficiencia de vitamina D durante la infancia puede causar problemas de conducta en la adolescencia destaca la importancia de mantener niveles óptimos de vitamina D durante toda la vida. Más allá de sus efectos sobre la salud mental, la deficiencia de vitamina D se ha visto implicada en problemas como la esclerosis múltiple e insuficiencia cardíaca crónica.
La vitamina D también reduce significativamente el estrés oxidativo del sistema vascular, lo que puede prevenir el desarrollo de enfermedades cardíacas. Además, optimizar los niveles de vitamina D es una de las mejores estrategias para prevenir la gripe, así como para reducir el riesgo de desarrollar cáncer.
Por ejemplo, las investigaciones anteriores descubrieron que un nivel de vitamina D de 47 ng/mL se encontraba relacionado con un riesgo 50% menor de cáncer de mama. La vitamina D tiene un efecto favorable sobre la salud inmunológica y mental, así como en la esperanza de vida, y en general, si todos en Norteamérica optimizaran sus niveles de vitamina D, se estima que:
• Las tasas de incidencia de todos los tipos de cáncer disminuirían en un 25%
• Las tasas de influenza y neumonía disminuirían en un 30%
• La septicemia disminuiría en un 25%
• La esclerosis múltiple disminuiría en un 40%
• Los resultados negativos del embarazo (incluyendo el asma, infecciones, trastornos óseos, insuficiencia cardíaca y autismo en bebés) se reducirían en un 10%
Si no está seguro de los niveles de vitamina D en usted o sus hijos, el primer paso para optimizarlos es comprobarlos. Weydert llega al extremo de decir que “uno puede elegir comprobar los niveles de 25 (OH) D para documentar la deficiencia de vitamina D, pero con los hallazgos generalizados de insuficiencia y deficiencia en la mayoría de los cultivos, es muy seguro comenzar la suplementación con vitamina D sin estos datos».
Dicho lo anterior, si opta por seguir esta vía, asegúrese de analizar sus niveles más adelante, para que pueda determinar la dosis correcta de vitamina D y así mantener niveles óptimos.
* Joseph Mercola es un ameritado médico norteamericano que promueve los tratamientos alternos para la salud. Sus artículos diarios se traducen a varios idiomas y cuenta con miles de seguidores en todo el mundo.
