Cuernavaca, Morelos, 24 de septiembre de 2018.- Las plantas medicinales forman parte del patrimonio cultural y su uso permanece desde tiempos ancestrales hasta nuestros días, cuando la industria farmacéutica genera un sinfín de medicamentos; comunicar su valor es fundamental, esa es el objetivo del simposio bilateral entre Italia y México “Las plantas medicinales mexicanas: patrimonio inmaterial y herramienta de desarrollo”, realizado ayer y hoy en esta ciudad, ubicada en el centro del país.
Alfredo Camhaji, asesor del coordinador general del Foro Consultivo Científico y Tecnológico (Fccyt), señaló que en la actualidad el mercado mundial de plantas aromáticas y medicinales aporta cerca de 83 mil millones de dólares (MMD), cuya segmentación es como sigue: la industria farmacéutica, incluyendo medicamentos a partir de precursores a base de plantas y registrados como plantas medicinales representan 44MMD del mercado; los alimentos funcionales a base de plantas, 14MMD; los productos herbarios de belleza, otros 14MMD, y los suplementos de especies para dieta, los restantes 11MMD.
Por lo tanto “el simposio concibe a las plantas medicinales como Patrimonio Cultural Inmaterial, que se compone por tradiciones orales, artes del espectáculo, usos sociales, rituales, actos festivos, conocimientos y prácticas relativos a la naturaleza y el universo, y saberes y técnicas vinculados a la artesanía tradicional. El Patrimonio puede contribuir al desarrollo sostenible”, comentó Camhaji.
El simposio, realzados los días 24 y 25 de septiembre en el Auditorio de la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología del Estado de Morelos, abordó el estatus de la investigación sobre plantas medicinales, tanto en México como Italia, su potencial de desarrollo sostenible en ambos países y contó con actividades alternativas como una feria de productos herbolarios y consultas gratuitas con médicos tradicionales.
De acuerdo con Camhaji, la elección del Estado de Morelos como sede del evento no fue algo casual; de hecho, “Morelos alberga 16 por ciento de la biodiversidad de México y es sede del vivero de plantas medicinales más grande América Latina, con una situación hidrológica privilegiada, abundantes manantiales y más de 800 especies de flora medicinal documentada científicamente (y seguramente con otro tanto pendiente de estudio). Tampoco es casualidad que se lleve a cabo en la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología del Estado de Morelos. Este confluir de voluntades nos dice algo; nos da esperanza y futuro”, dijo.
Agregó que estamos en un momento en el que se abre una nueva etapa con la oportunidad de promover el desarrollo de la producción de plantas medicinales dentro del marco de una agricultura diversificada y sostenible.
