Importancia de los endocrinólogos y endocrinólogos pediatras

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Ciudad de México, 23 de julio de 2024.- El adecuado desarrollo físico y hormonal de los niños, niñas y jóvenes es una prioridad que no debe pasarse por alto. Los endocrinólogos pediatras juegan un papel esencial en la vida de los pequeños, asegurando que cualquier trastorno hormonal sea diagnosticado y tratado a tiempo, permitiéndoles desarrollarse de manera óptima y crecer con confianza.

Mañana, 24 de julio, es el Día del Endocrinólogo, por lo que es importante reconocer la labor de estos especialistas, quienes atienden una amplia gama de trastornos hormonales que afectan tanto adultos, niños, niñas y adolescentes en diferentes etapas de su vida. Dentro de las enfermedades más frecuentes que atiende un endocrinólogo se encuentran: la diabetes, problemas de tiroides, siendo el hipotiroidismo el más prevalente, trastornos del crecimiento, trastornos del metabolismo como la obesidad y desórdenes del sistema endócrino, entre otros. Su enfoque principal es diagnosticar, tratar y manejar desequilibrios hormonales para ayudar a mantener un equilibrio óptimo en el cuerpo.

En México, hay aproximadamente 1,500 endocrinólogos, y alrededor de 300 están subespecializados en la rama de pediatría. Patricia Medina Bravo, endocrinóloga pediatra, explicó que algunos de los trastornos más comunes incluyen:

  • Talla baja: Puede ser el resultado de factores como la deficiencia de la hormona del crecimiento, desnutrición en etapas críticas del desarrollo y condiciones genéticas como el Síndrome de Down o el Síndrome de Turner, que afectan la producción de hormonas y el crecimiento óseo.
  • Pubertad precoz y tardía: Estas alteraciones hormonales pueden significar un inicio temprano o retrasado del desarrollo sexual, requiriendo evaluación y tratamiento por parte de un especialista.
  • Diabetes y prediabetes infantil: Enfermedades metabólicas que demandan un manejo especializado para controlar los niveles de azúcar en la sangre y prevenir complicaciones a largo plazo.
  • Obesidad: Es un problema creciente con implicaciones hormonales; el exceso de peso corporal puede desencadenar cambios hormonales que afectan negativamente la salud a largo plazo.
  • Disfunción tiroidea: Trastornos como el hipotiroidismo y el hipertiroidismo pueden afectar significativamente a niñas, niños y jóvenes, causando síntomas como fatiga, aumento o pérdida rápida de peso, irritabilidad, problemas de concentración y de crecimiento.

“Los especialistas en endocrinología pediátrica no sólo están capacitados para diagnosticar y tratar trastornos hormonales en niños, niñas y adolescentes, sino que también desempeñan un papel crucial en guiar a las familias sobre la importancia del cuidado hormonal desde una edad temprana. La detección a tiempo de condiciones como la talla baja o la pubertad precoz puede marcar una diferencia significativa en el desarrollo futuro del niño”, destacó Medina Bravo.

El crecimiento saludable de los niños y niñas requiere atención especial ante los problemas hormonales que pueden afectar su desarrollo físico y emocional a largo plazo. Los endocrinólogos pediatras están capacitados para detectar, diagnosticar y tratar estas condiciones a tiempo, mejorando su bienestar.

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