En los últimos años, se ha dado a conocer que el café proporciona diversos beneficios para la salud, incluyendo disminuir los riesgos de algunas de las enfermedades más graves y comunes, como derrames cerebrales, diabetes tipo 2 y enfermedades cardíacas.
Los científicos no siempre han podido identificar los mecanismos de los aspectos beneficiosos y protectores del café, pero según un estudio publicado en Plos Biology, ha surgido nueva información.
El estudio, realizado por investigadores de la Universidad Heinrich Heine y el Instituto de Investigación de Medicina Ambiental IUF-Leibniz en Dusseldorf, Alemania, reveló un «nuevo modo de acción del café»–un concepto intrigante para millones de personas alrededor del mundo, quienes lo requieren para iniciar el día (o continuar por la noche).
Los beneficios que proporciona son: mejorar los procesos mitocondriales y los que son dependientes de la respiración en el sistema cardiovascular.
Sorprendentemente, el mecanismo que proporciona estos beneficios es la cafeína, un factor estimulante muy conocido, que al ser consumido en dosis específicas, aumenta los niveles del inhibidor de la cinasa dependiente de ciclina 1B (CDKN1B)/p27 (anteriormente conocido como un inhibidor del ciclo celular), que es una proteína reguladora localizada dentro de las mitocondrias, conocida como la fuente de energía de las células. Los autores del estudio escribieron:
«La capacidad migratoria de las células endoteliales, las cuales necesitan mitocondrias intactas, es completamente dependiente de la p27 mitocondrial. Esta última mejora la capacidad de la membrana mitocondrial, incrementa el contenido de trifosfato de adenosina (ATP) y es necesaria para generar el efecto estimulante de la cafeína».
Las investigaciones anteriores de los científicos demostraron que para obtener el máximo beneficio, la concentración de cafeína es muy específica.
Es decir, se determinó que un mínimo de cuatro tazas de café (o cuatro dosis de espresso) es la cantidad que promueve la migración de la proteína reguladora hacia las mitocondrias, lo cual mejora la función de las células endoteliales que recubren el interior de los vasos sanguíneos, mientras que, protegen a las células cardiovasculares del daño. De acuerdo con Science Daily:
«Aquí, demostraron que una proteína llamada p27, conocida principalmente como un inhibidor del ciclo celular, estaba presente en las mitocondrias en las principales células cardiacas.
En estas células, la p27 mitocondrial promovió la migración de células endoteliales, protegió las células del músculo cardíaco del proceso de muerte celular y desencadenó la conversión de fibroblastos en las células que contenían las fibras contráctiles–lo cual es crucial para la reparación del músculo cardíaco, después de un infarto de miocardio.
Descubrieron que la cafeína inducía el envío de la p27 a las mitocondrias, lo cual generaba esta serie de efectos beneficiosos, una concentración que se lograba cuando los seres humanos bebían cuatro tazas de café. La cafeína causaba un efecto protector contra el daño cardíaco en los ratones prediabéticos, con obesidad y de edad avanzada».
La función de la p27 y cantidades específicas de cafeína
Los principales autores del estudio, Judith Haendeler y Joachim Altschmied, señalan que el «modo de acción» de la cafeína no sólo promueve la protección, sino también la reparación del músculo cardíaco debido al movimiento de p27.
Solamente, después de consumir cuatro tazas –o 32 onzas– se induce la «translocación» endotelial a las mitocondrias. Como indicó Newsweek, «las proteínas reguladoras se unen con partes específicas del ADN y están involucradas en la expresión génica. Esto implica ayudar a proteger las células cardiovasculares del daño».
Las células endoteliales en los vasos sanguíneos desempeñan muchas funciones cruciales para mantener la salud, en especial la función vascular.
Lo cual está estrechamente relacionado con las mitocondrias, porque ahí es donde las células transforman las proteínas, grasas y azúcares que consumimos, en formas de energía química que el cuerpo necesita para optimizar sus funciones y salud. Ya que la concentración óptima de cafeína promueve la migración celular y protege la salud cardiaca, Digital Journal señala que:
«Sin embargo, es importante señalar que este efecto de la cafeína sólo se ha comprobado en ratones prediabéticos, con obesidad y de edad avanzada. No necesariamente ocurrían los mismos efectos en seres humanos, y es posible que se requieran más estudios».
Además, los investigadores han señalado que «la p27 protege las células musculares cardiacas de la muerte celular y es necesaria para hacer la conversión de fibroblastos en miofibroblastos mecánicamente fuertes y contráctiles, un proceso crucial después de un infarto de miocardio [ataque cardíaco]». Como explica Science News:
«Por lo regular, la p27 se encuentra en el núcleo de las células, donde ayuda a controlar el momento en el que las células se dividen. Una función para potenciar la energía mitocondrial que se desconocía anteriormente».
La P27 mitocondrial también incrementa los niveles de trifosfato de adenosina (ATP) –señala el estudio– y protege a los cardiomiocitos (células del músculo cardíaco) contra la apoptosis o la muerte celular programada.
Haendeler indicó que considera que el estudio podría generar mejores enfoques para proteger el músculo cardíaco del daño, e incluso podría cambiar el debate sobre la viabilidad del consumo de café o cafeína específicamente como un factor alimenticio adicional para adultos mayores.
De hecho, la p27 mitocondrial podría utilizarse como una posible estrategia terapéutica para prevenir enfermedades cardiovasculares y prolongar el ciclo de salud –la cantidad de tiempo que una persona se mantiene saludable.
Una de las conclusiones del estudio –y otros realizados previamente— en pocas palabras, como revela Forbes –la razón por la que la cafeína/café podría ser útil para una persona después de tener un ataque cardíaco, e «… incluso podría ejercer un efecto protector para las personas que están en mayor riesgo de enfermedades cardíacas. Sin duda, a algunas personas les agradará saber esto».
Consumo de café y protección contra el cáncer
Los estudios previos sobre los posibles beneficios de consumir café demuestran que tiene un efecto protector contra cuatro de las enfermedades mortales más prevalentes en los Estados Unidos: enfermedades cardíacas, cáncer, diabetes y derrames cerebrales.
En particular, múltiples estudios realizados durante varios años demuestran que beber café proporciona beneficios anticancerígenos. Enseguida se encuentran tres de sus numerosos ejemplos:
- En las personas con cáncer de colon avanzado, tomar cuatro o más tazas diarias de café disminuyó en un 52% el riesgo de recurrencia del cáncer o muerte, en comparación con las personas que no bebieron café en lo absoluto.
- Un metaanálisis, realizado en 2007, informó que el incremento en el consumo de dos tazas diarias de café estuvo relacionado con un riesgo 43% menor de cáncer de hígado.
- Otro metaanálisis que incluyó 59 estudios reveló que el incremento en el consumo de una taza diaria de café estuvo relacionado con un riesgo 3% menor de cáncer.
¿Por qué el café otorga este tipo de beneficios? La respuesta sería, por sus poderosos antioxidantes llamados polifenoles.
Los antioxidantes son la forma natural de proporcionarle a sus células una defensa adecuada contra el ataque de especies reactivas del oxígeno (ROS) o radicales libres, un tipo de metabolito altamente reactivo producido naturalmente en el cuerpo, como resultado del metabolismo normal y producción de energía.
De hecho, los habitantes en los Estados Unidos obtienen más antioxidantes al consumir café, que de cualquier otra fuente alimenticia, y los investigadores señalan que «no hay ningún otro alimento que se le compare ni cercanamente».
Esa investigación fue presentada en la reunión anual de la Sociedad Americana de Química (la sociedad científica más grande del mundo) en el año 2005. Algunos de los ejemplos de los antioxidantes presentes en el café son cantidades significativas de ácido hidrocinámico y polifenoles.
Asimismo, Haendeler es consciente de que habrá personas que comenzarán a beber más café debido a la investigación de su equipo, pero advierte que también deberían implementar otras medidas para proteger su salud cardíaca, como hacer ejercicio y alimentarse adecuadamente. De lo contrario, probablemente no será muy beneficioso para las personas.
De igual manera, beber demasiada cantidad de café podría tener el efecto contrario; es decir, transportar demasiada cantidad de p27 a las mitocondrias, lo que podría destruirlas y agravar los problemas de salud. Agregó que, «no se trata [simplemente] de tomar pastillas de cafeína, dejar de llevar una alimentación saludable y hacer ejercicio, así como ser sedentario y adicto a la televisión».
Si toma pastillas de cafeína no obtendrá todos los polifenoles
En cuanto a la cuestión sobre cómo el café beneficia a la salud cardiaca, al parecer la cafeína podría desempeñar un rol, pero eso no descarta los beneficios de los polifenoles presentes en el café (que no contienen las pastillas de cafeína).
Es interesante que en 2013, los investigadores señalaran para la Revista del Colegio Americano de Cardiología que «el café es una bebida compleja que contiene cientos de compuestos biológicamente activos».
Después del agua, el café y té son las bebidas más populares en el mundo. En efecto, contienen cafeína, pero también están cargadas de polifenoles antioxidantes, que son los principales transportadores de beneficios nutricionales.
Los potentes compuestos polifenólicos en el café podrían ayudar a disminuir el riesgo de derrames cerebrales y diabetes e incrementar los niveles de glucosa, así como la presión arterial, entre muchos otros beneficios. Por su parte, beber café está relacionado con un menor riesgo de muerte prematura; en especial, las muertes causadas por problemas cardiovasculares.
Aun así, incluso si no es un bebedor asiduo de café, podría incrementar fácilmente su consumo de antioxidantes al comer productos frescos. Los vegetales y frutas, en particular las bayas, son fuentes ideales de antioxidantes.
Y si bebe café, la mejor manera para conseguir una gran variedad de nutrientes de origen vegetal es obtener antioxidantes a través de una alimentación variada, algunos no se pueden obtener de ninguna otra manera.
Cómo elegir la mejor opción de (Léase: más saludable) café para beber
Para obtener el mejor sabor y optimizar la salud gracias a los polifenoles y otros compuestos beneficiosos presentes en el café, debe elegir uno que sea orgánico y haya crecido a la sombra. Este se encuentra disponible en los mercados minoristas o puede ordenarlo en línea.
También deberá comprar café en forma de granos enteros y molerlos en casa para evitar la ranciedad, ya que el café premolido ya podría estar rancio para cuando lo beba.
Los estudios varían sobre si beber café descafeinado proporciona los mismos beneficios que la variedad con cafeína.
No obstante, si toma café descafeinado, debe asegurarse de que el proceso de descafeinado no involucre sustancias químicas, como Direct Process, que utiliza el químico cloruro de metilo para eliminar la cafeína de los granos de café, que PubChem, una base de datos sobre químicos accesible al público, enlista como un posible agente cancerígeno.
Cuando se trata de consumo de café (y hasta cierto punto cualquier otro tipo de alimento o bebida) es fundamental asegurarse de que los granos de café:
- Sean puros y no estén adulterados
- No estén rociados con pesticidas o herbicidas, sustancias químicas o fertilizantes sintéticos, que contaminan el producto y anulan sus beneficios
- No estén irrigados con agua contaminada
- No provengan de fuentes transgénicas
- Sean disfrutados en su forma natural; ya sea negro o con aceite MCT (triglicéridos de cadena media), que es una grasa beneficiosa que brinda aún más ventajas para la salud, en vez de azúcar o crema pasteurizada
