Ciudad de México, 24 de julio de 2024.- En el marco del Día Mundial del Autocuidado, que se celebra cada 24 de julio, La Universidad La Salle México destacó la importancia de integrar el autocuidado en la formación universitaria, preparando a la comunidad estudiantil para enfrentar los desafíos académicos, pero también, para llevar una vida equilibrada y saludable.
Numerosos estudios han demostrado la importancia del autocuidado en el ámbito académico. El bienestar emocional y social es crucial no solo para el éxito académico, sino también para la vida personal y profesional de los estudiantes. Investigaciones afirman que los estudiantes que practican el autocuidado son más resilientes, manejan mejor el estrés y están más preparados para enfrentar los desafíos de la vida adulta.
De acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud, “se estima que entre el 10 y el 20% de los adolescentes experimentan problemas de salud mental; sin embargo, estos siguen sin ser diagnosticados ni tratados adecuadamente”.
Ante ello, la Universidad La Salle México cuenta, desde hace más de 20 años, con una red que se encarga de brindar acompañamiento y apoyo que promueva el desarrollo de estilos de vida saludables -Cive (Coordinación de Impulso y Vida Estudiantil).
En el último año, el Cive ha llevado a cabo diversas actividades y servicios enfocados en el apoyo académico, emocional, médico, desarrollo de clases, conferencias y talleres, tanto para estudiantes como para colaboradores.
Para docentes, se han llevado a cabo capacitaciones bajo el título «Hablemos de…», abordando temas cruciales para la gestión del estrés y el bienestar mental. En las Jornadas de Salud Mental se han ofrecido conferencias y talleres sobre diversos temas, tales como salud mental y adicciones, prevención del suicidio, manejo del estrés financiero y la relación entre violencia de género y salud mental. Estos eventos han equipado al claustro docente con herramientas prácticas para enfrentar desafíos emocionales y apoyar a sus estudiantes de manera efectiva.
En el caso de los colaboradores, se promueve la impartición de talleres cuyo objetivo es capacitar al personal para actuar con confianza y eficacia durante situaciones críticas, mejorando el bienestar general del entorno laboral y educativo. La idea es proporcionar al personal, las herramientas necesarias para manejar situaciones de estrés y crisis entre estudiantes y colegas. Los colaboradores aprenden técnicas para ofrecer apoyo inmediato, evaluar las necesidades emocionales y psicológicas y derivar a los individuos a servicios profesionales cuando sea necesario. En diciembre pasado, se brindó por primera ocasión el Taller de Primeros Auxilios Psicológicos y, a la fecha, alrededor de 200 personas han recibido la capacitación, incluyendo la planta de docentes de ambas preparatorias (Condesa y Santa Teresa de la Ciudad de México).
Para estudiantes, las Jornadas de Salud Mental han incluido talleres y conferencias diseñados para mejorar su bienestar emocional y mental. Actividades como la regulación emocional, mindfulness, tolerancia al malestar y efectividad interpersonal han sido fundamentales. Talleres específicos como la prevención del suicidio en estudiantes, manejo de emociones y salud mental en contextos universitarios han sido desarrollados. Además, se han llevado a cabo Jornadas de Bienestar que han incluido campañas de donación de sangre y talleres sobre nutrición y relaciones sanas.
Programas como el Taller «El Valor de la Vida» y el “Tamizaje Bienestar 360” de la Universidad La Salle México equipan a los estudiantes con habilidades esenciales para su desarrollo integral, ayudándoles a mantener un equilibrio entre su vida académica y personal. Si bien el número de personas que toman el taller varía cada semestre, normalmente un promedio de 2 mil estudiantes desarrolla habilidades derivadas del mismo, que se realiza cada seis meses. Gracias a estos programas, tan solo en el último año, se han podido atender a más de 100 mil personas, a través de poco más de 38 mil actividades realizadas.
El Tamizaje Bienestar 360 es un programa integral de la Universidad La Salle México diseñado para identificar y abordar tempranamente los riesgos biosociales entre estudiantes, especialmente aquellos en su primer año. Utilizando el instrumento AySP-E1, una herramienta validada que evalúa la sintomatología afectiva (ansiedad, depresión, riesgo suicida y malestar físico), así como factores físicos y económicos, el tamizaje se desarrolla en tres fases: diseño y construcción de la escala, aplicación y análisis estadístico de los datos y evaluación de la calidad métrica de las variables. Este proceso meticuloso permite identificar de manera precisa los casos de alto riesgo y planificar intervenciones adecuadas para mejorar el bienestar de los estudiantes.
Sin duda, hay mucho por hacer en materia de prevención y atención al tema de la Salud Mental en los jóvenes. Como sociedad, nos enfrentamos a desafíos cada vez más complejos debido a las dinámicas sociales, económicas y culturales que se experimentan en la niñez, la juventud y la etapa adulta.
Ahorro de hasta 122 millones de horas en el sistema de salud
Organizaciones como Afamela (Asociación de Fabricantes de Medicamentos de Libre Acceso), Ilar (Asociación Latinoamericana de Cuidado Responsable) y Amaisa (Asociación Nacional de la Industria de Suplementos Alimenticios) se unieron en un llamado a la población para generar conciencia sobre el autocuidado en todas sus dimensiones que van desde la nutrición hasta la optimizar los recursos sanitarios, impulsando así una salud sostenible.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define al autocuidado como la capacidad de promover y mantener la salud, prevenir enfermedades y manejar la enfermedad con o sin apoyo médico. Este concepto se apoya en siete pilares que incluyen conocimiento y alfabetización de la salud; uso responsable de servicios de salud, actividad física, alimentación sana, evitar riesgos innecesarios, buena higiene y bienestar mental. Esto promoviendo un rol activo en la propia salud para mejorar la calidad de vida y reducir la dependencia de servicios médicos.
Un estudio de la Federación Global de Autocuidado (Gscf) revela que en América Latina, la implementación de prácticas de autocuidado podría economizar aproximadamente 7.2 mil millones de dólares anuales en el tratamiento de condiciones simples y no graves. Además, se podrían ahorrar hasta 122 millones de horas productivas de profesionales de la salud, las cuales podrían ser reasignadas a casos más críticos. Este ahorro enfatiza la importancia de integrar el autocuidado en las políticas de salud pública, no sólo para aliviar la carga sobre los sistemas de salud, sino también para mejorar la eficiencia y la respuesta general de los servicios médicos en la región.
Durante su intervención, Matías Caride, presidente del Consejo Directivo de Afamela, destacó la importancia de empoderar a la población para tener mayor cuidado de su propia salud y de integrar al autocuidado en las políticas de salud pública: “esto permitiría para aliviar la carga sobre los sistemas de salud, así como mejorar la eficiencia y la respuesta general de los servicios médicos. Por cada peso que se gasta en medicamentos de venta libre en México, el Estado se podría ahorrar hasta cinco pesos. Eso da un poco más de 20,000 millones de pesos de ahorro para el sistema público”, subrayó.
La colaboración entre diversos sectores de la sociedad, como autoridades, profesionales de la salud y el sector privado, es clave para impulsar el acceso a nutrientes. A través de esta colaboración, se puede fomentar el autocuidado eficaz, especialmente en lo que respecta a alimentación saludable y el uso adecuado de suplementos alimenticios. La clave está en contar con una población adecuadamente informada que comprenda que los suplementos alimenticios son parte de un enfoque integral de salud, según Coral Moctezuma, gerente de Anaisa.
Por su parte, Juan Thompson, presidente ejecutivo de Ilar, señaló que el autocuidado es fundamental para garantizar la equidad y la cobertura universal de salud, brindando mejores resultados a la población. “De allí la importancia de marcos regulatorios que fomenten la innovación y faciliten el acceso a intervenciones y productos de autocuidado. Esto requiere el compromiso y el apoyo de todos los actores del ecosistema de salud, como asociaciones, profesionales de la salud, tomadores de decisiones y agencias reguladoras”.
Fomentar una cultura del autocuidado es fundamental, tanto a nivel individual y familiar como para el sistema de salud. En ese sentido, desde abril de este año, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad la inclusión del concepto de autocuidado en la Ley General de Salud, lo que refuerza el derecho a la salud y sienta las bases para una población mejor informada sobre la gestión de la propia salud.
En el marco del Día Mundial del Autocuidado, se enfatiza la necesidad de fortalecer el papel de los profesionales y la industria de la salud, así como otras comunidades médicas, para promover el autocuidado entre los mexicanos. Esta colaboración trasciende la simple búsqueda de innovación y mejora en las prácticas de autocuidado, también facilita los procesos de estandarización y construcción de confianza que son esenciales para mantener el ritmo de la innovación y asegurar un acceso seguro y eficiente a los recursos de salud para toda la población.
Autocuidado de la salud sexual
El Día Mundial del Autocuidado es una fecha dedicada a concienciar sobre la importancia de prácticas y hábitos que promuevan la salud y el bienestar individual. Este día es una oportunidad para reflexionar sobre la responsabilidad personal en el mantenimiento de la salud y para promover el autocuidado como una herramienta clave en la prevención de enfermedades y la mejora de la calidad de vida.
La OMS destaca las intervenciones de autocuidado como esenciales para mejorar la salud, definiéndolo como la capacidad de personas, familias y comunidades para promover, prevenir y manejar la salud con o sin ayuda médica. Sus directrices cubren temas de planificación familiar y salud reproductiva, recomendando intervenciones específicas para la salud sexual y reproductiva. Además, proporcionan un marco centrado en la persona, incorporando principios de derechos humanos, ética e igualdad de género.
El autocuidado de la salud sexual es una práctica integral que implica tomar decisiones informadas y responsables para proteger y promover nuestra salud sexual y reproductiva. Esto abarca una amplia gama de comportamientos y hábitos que van desde el uso de métodos anticonceptivos hasta la realización de chequeos médicos regulares, así como la comunicación abierta y la educación continua sobre temas sexuales.
“El autocuidado es fundamental para mantener una vida saludable e incluye una atención especial a la salud sexual, aspecto esencial en el bienestar y el desarrollo humano. El autocuidado implica hacerse pruebas de detección oportunamente, clave para identificar y tratar infecciones de transmisión sexual de manera temprana” dijo Gabriel Hernández, de la Clínica Lgbt+. “Promover la salud sexual y el autocuidado no solo beneficia a cada individuo, sino que también fortalece a todos”, señaló.
Al respecto, Marcela Vázquez, brand manager de Trojan México, destaca el uso del condón como pilar clave del autocuidado en temas de salud sexual, “este método no solo es altamente efectivo para la planificación familiar, también es fundamental para reducir el riesgo de infecciones de transmisión sexual (ITS), como el VIH, la gonorrea, la clamidia y herpes genital, entre otras. Su uso es una responsabilidad compartida y al optar por este método, nos protegemos a nosotros mismos y cuidamos la salud de nuestra pareja o parejas sexuales”.
Trojan compartió una guía para disfrutar de una vida sexual plena basada en el autocuidado:
1. Educación y conocimiento. La educación es la base del autocuidado de la salud sexual. Informarse sobre ITS, métodos anticonceptivos y consentimiento es esencial. Recordemos que es responsabilidad de todos investigar y contar con la información necesaria para tomar decisiones informadas.
2. Comunicación abierta. Hablar abiertamente sobre expectativas, límites y preocupaciones sexuales. La comunicación clara y honesta ayuda a construir una relación basada en el respeto y la confianza, elementos esenciales para una vida sexual saludable.
3. Uso constante del condón. Como se mencionó anteriormente, el uso del condón es una práctica esencial en el autocuidado de la salud sexual. Además de prevenir ITS, el condón también puede incrementar el placer sexual con alternativas que aumentan el placer y, al mismo tiempo, al reducir la ansiedad relacionada con el riesgo de infecciones y embarazos no planeados.
4. Realización de chequeos médicos regulares. Las visitas periódicas al médico para realizarse chequeos y pruebas de ITS deben aplicarse con regularidad, incluso, si no se presentan síntomas, ya que algunas infecciones pueden estar presentes y ser contagiosas.
5. Consentimiento mutuo. El consentimiento es un componente básico de cualquier actividad sexual. Asegurarse de que todas las partes involucradas están de acuerdo y cómodas con cualquier acto sexual es vital para una experiencia positiva y respetuosa. El consentimiento debe ser claro, continuo y reversible en cualquier momento.
6. Autoconocimiento y exploración. Conocer nuestro propio cuerpo y entender qué nos proporciona placer es una parte importante del autocuidado. La masturbación, por ejemplo, es una manera saludable de explorar nuestra sexualidad.
