Dra. Yara Brom*

Ciudad de México, 30 de octubre de 2018.- Con la celebración de Día de Muertos tan cerca, vale la pena tocar un tema delicado: cómo comunicarle a un niño la muerte de un ser querido. Porque, si de por sí para nosotros los adultos es difícil aceptar que la muerte es sólo una etapa más de la vida, ¿cómo será para nuestros hijos?

Afortunadamente, existen algunas estrategias para ayudar a los pequeños a sobrellevar estas etapas de la mejor manera posible.

  • Sé honesto contigo mismo: los niños más afectados por la muerte de un ser querido son aquellos que conviven con adultos que no logran superar esa pérdida. Así, en la medida en que tú trabajes en tu propio duelo, lograrás que tu niño también lo supere.
  • Háblale con la verdad: no uses frases como “se durmió”, no le mientas diciendo que “se fue de viaje”. Por más duro que te parezca, lo mejor es decirle al pequeño que ese ser querido ya no forma parte de este mundo y que no va a volver.
  • Se paciente: el duelo en los niños es un proceso que puede durar unos meses, o puede extenderse hasta uno o dos años. En esos momentos estará enojado, llorón, berrinchudo, pero en la medida en que tú estés cerca y le ayudes a aceptar y manejar sus sentimientos, lograrás que esté cada día mejor.
  • Entiende el proceso del duelo: es importante comprender que no es un proceso lineal: habrá meses en que esté mucho más tranquilo, y fechas en que notes recaídas, como cumpleaños, Navidad y Año Nuevo u otras festividades. Sólo habla con él (o ella) y recuérdale que sus sentimientos son tan válidos como los de cualquier otro miembro de la familia.
  • Ayúdale a recordar al ser querido con alegría: haz que forme parte de las conversaciones cotidianas, pero de forma natural, incluso con una sonrisa. Esto hará que el niño poco a poco se recupere de esa pérdida.
  • Dale herramientas para manejar mejor sus emociones, en este y otros momentos difíciles:
  • Enséñale a respirar, a que llene sus pulmones de aire mientras cierra los ojos y piensa en su más bonita experiencia. Practícalo con él.
  • Ofrécele alternativas para distraerse cuando se sienta triste o enojado, juntos pueden encontrar un buen juego mental, un rompecabezas o convivir con las mascotas.
  • Pasen tiempo juntos: aun cuando no jueguen, permítele estar cerca; si tú estás en tu habitación leyendo, invítalo a que esté contigo para que también lea. Estas acciones harán la diferencia en el tiempo de calidad.

Lo más importante es que los niños aprendan que la muerte es un proceso tan natural como cualquier otro momento. Y justo estas fechas, cuando los mexicanos celebramos a nuestros ancestros, son una excelente oportunidad para transmitirles esta enseñanza que nos acompaña desde tiempos prehispánicos.

* Yara Brom es licenciada en Psicología por la Unam. Cuenta con estudios de maestría en Psicología Clínica por la Facultad de Psicología de la Unam y es diplomada en Tanatología, por la división de educación continua, de la facultad de medicina de la Unam. Mujer y persona, acompaña a las personas en sus procesos de vida e integra sus conocimientos como psicóloga, terapeuta Emdr (Terapia Integral que combina esta técnica con psicoterapia y estrategias de coaching, enfocada en resolver recuerdos traumáticos que no ayudan a crecer ni a adaptarse a las situaciones diarias y los convierte en pensamientos adaptativos que sirven para la toma de decisiones y la vida cotidiana), coach y psicoanalista. Cuenta con 22 años de experiencia clínica y 15 años utilizando la terapia Emdr.

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