Alfa Omega: Nos guste o no nos guste, Rosario y Evo están superfelices

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Jorge Herrera Valenzuela

• La presidencia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (Cndh), a cargo de quien vivió en carne propia lo que es tener un hermano desaparecido desde 1974. No se requería de un jurista, de una persona con maestría en alguna asignatura universitaria ni de un erudito en Derechos Humanos, según manifestó el presidente Andrés Manuel López Obrador en su intrascendente conferencia mañanera del pasado miércoles 13, el día en que cumplió 66 años de edad.
• “Yo di la instrucción de ofrecer el asilo”, declaración presidencial en el Salón Tesorería. De ahí salió la orden de enviar un jet de la Fuerza Aérea Mexicana a Bolivia y traer al renunciado Juan Evo Morales Ayma, quien el pasado 26 de octubre cumplió 60 años y no disfrutó su cuarta reelección ganada seis días antes. Duró en el poder 13 años 9 meses y 18 días.

Los acontecimientos tienen una profunda significación en la vida de los mexicanos, porque nos señalan cómo debe entenderse al gobierno lopezobradorista. Por ello, espero equivocarme, muchos nombramientos han recaído en personas que no cuentan con el perfil adecuado, no tienen experiencia práctica en la tarea que se les asigna y carecen de antecedentes curriculares. Hay necesidad en determinados cargos de cubrir las apariencias y, por ello, se integran ternas a sabiendas de quien será el elegido.

El arribo de María del Rosario Piedra Ibarra, excandidata a diputada federal y parte del comité ejecutivo nacional de Morena, provocó polémicas desde el mismo día en que se anunció que era aspirante a dirigir los destinos de la Comisión de Derechos Humanos. Su elección fue calificada de fraudulenta, originándose una histórica controversia en el Senado, donde fueron desplegadas grandes mantas en pro y en contra del resultado de la votación llevada a cabo el jueves 7 y seis días después se impuso todo a favor de la activista señora Piedra Ibarra.

Mal presagio en la Cndh
Para comenzar, debo comentar que doña María del Rosario rindió su protesta en una escena bastante accidentada. Vimos en la transmisión televisiva el golpeo entre las y los legisladores, uno de ellos cayó al piso, mientras se escuchaba el “sí protesto” de la triunfadora que sonreía nerviosamente y mostraba sobre su pecho una fotografía, en blanco y negro, de su hermano Jesús. Unos calificaron el momento de vergonzoso y otros no repararon en referirlo como zafarrancho.

La gestión de la señora Piedra Ibarra tiene un mal principio. Desde la toma del multifacético jurista Jorge Carpizo McGregor, primero de los cinco presidentes y de la presidenta doctora Mireille Rocatti, no habíamos visto una ceremonia tan violenta como la del martes pasado. Ah, ya hubo un presidente interino y un encargado del despacho, Carlos Rodríguez y José Luis Ramos Rivera, respectivamente.

En sus respectivas ediciones de Radio Fórmula de la tarde, el miércoles 13, Joaquín López Dóriga y Eduardo Ruiz Healy, no dudaron en criticar severamente a la nueva presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, en virtud de que cuando se le formuló la primera pregunta, por parte de los reporteros, sobre cómo actuaría en torno a los asesinatos de los reporteros en el actual sexenio, María del Rosario respondió con sarcasmo: ¿qué hay reporteros muertos? Joaquín dijo que la funcionaria fingía ignorancia o era ingenua, mientras que Eduardo no titubeó al calificar la respuesta como una estupidez.

El tabasqueño, parado frente a su atril y luciendo traje nuevo, por ser día de cumpleaños, sonriente declaró que estaba feliz por el nombramiento de su amiga María del Rosario. Por supuesto que estaba contento, si él fue quien desde Palacio Nacional propuso a la misma persona que el 23 de octubre puso en sus manos (en resguardo) la Medalla Belisario Domínguez que le fue otorgada, este año, a doña María del Rosario Ibarra de Piedra.

Trato de jefe de Estado a Evo
Múltiples y controvertidas las opiniones vertidas en diversos sectores nacionales, siendo mayoría las negativas por el rescate, asilo político y trato de jefe de Estado que se le da a Evo Morales, quien iba a comenzar su cuarto período cuatrienal como presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, para nosotros simplemente Bolivia. Inicialmente, se informó que se mantendrá en secreto donde vivirá el boliviano, a quien se le puso una escolta militar con elementos del desparecido Estado Mayor Presidencial y el gobierno cubrirá los gastos de su estancia.

Para que no hubiese duda alguna, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo, con mucha firmeza y voz muy clara: “Yo di la instrucción de ofrecer el asilo político”. Él dispuso el vuelo para ir por su amigo que estaba en Cochabamba. El regreso, saliendo de La Paz, fue muy complicado porque no todos los países permitieron que la nave mexicana sobrevolara determinados espacios aéreos. La historia de su arribo a suelo mexicano ha tenido amplia difusión e inclusive Evo ya dio una conferencia en el Museo de la Ciudad de México que fue transmitida en vivo por Foro TV. El hombre está ampliamente agradecido con el tabasqueño y aseguró que seguirá en la lucha política para regresar a pacificar a sus paisanos.

La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, le extendió una “visa humanitaria” y Claudia Sheinbaum Pardo, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, lo declaró Huésped Distinguido de la Ciudad de México. Un diputado pidió a sus colegas morenistas, petistas y “pesistas” que aporten un día de sus haberes para juntarle “un apoyo” a Evo.

Mientras tanto en Bolivia la senadora Jeanine Añez Chávez asumió la presidencia y tiene un plazo de 90 días para convocar a elecciones presidenciales. Jeanine exige al gobierno mexicano que Evo no siga violando el derecho de asilo, porque está utilizando la tribuna para hacer llamado a sus seguidores en Bolivia.

Aquí en la Ciudad de México, la embajadora boliviana María Teresa Mercado declaró que el gobierno mexicano no reconoce a la autoproclamada presidenta. Tal vez, esto último obedezca a una observación que hizo la tapatía Rosa Chávez Cárdenas: “La sospecha de muchos resultó cierta. Evo apoyó la campaña de Morena y qué dijeron sus cuates, vamos rescatándolo para que no se arme un escándalo como el de Odebrecht”.

Preguntas para meditar:
¿Teme el gobierno mexicano que Evo sea blanco de un atentado y, por eso, lo ocultan y está custodiado por militares mexicanos?

Amado Nervo, hace un siglo
¿Quién no ha oído, leído o recitado el poema En Paz? Sí, uno de los muchos que nos heredó el nayarita Amado Nervo. Pues en esta semana se cumplieron 100 años de que el periodista, poeta y diplomático fue inhumado en la Rotonda de los Hombres Ilustres (hoy es de las Personas Ilustres) con honores civiles y militares, con asistencia de veinte mil personas que lo recibieron en la hoy desaparecida Estación Ferroviaria de Buenavista.

Nervo, cuyo nombre completo fue José Amado Ruiz de Nervo Ordaz, después de una trayectoria académica como profesor en la Escuela Nacional Preparatoria, ya consumado como poeta y periodista, fue enviado por el presidente Venustiano Carranza a Argentina y a Uruguay como ministro plenipotenciario y delegado en el Congreso Panamericano del Niño. Estaba casado con Ana Cecilia Luisa Dailliez, a quien conoció durante su estancia en París y tuvieron 2 hijos; ella murió muy joven, a consecuencia de una uremia (alto nivel de urea en la sangre), el autor de La Amada Inmovile falleció en Montevideo, capital uruguaya, el 25 de mayo de 1919 y después de seis meses llegaron, por la vía marítima, sus restos al puerto de Veracruz y trasladados finalmente por ferrocarril al entonces Distrito Federal.

El subsecretario Hilario Medina, exdiputado constituyente, presidió el homenaje que en el edificio de la Secretaria de Relaciones Exteriores se le rindió a Nervo, cuyo féretro durante la travesía fue cubierto con las banderas de México, Argentina, Cuba y Uruguay. En la Rotonda fueron leídos varios de sus poemas y el poeta fue despedido con aplausos. Era la tarde del 14 de noviembre de 1919.

P. D. Recibí del señor Carlos Popoca Lagunas, administrador central de Comunicación Institucional, del Servicio de Administración Tributaria, el SAT, una carta en que precisa que el cantante rocanrolero Enrique Guzmán “sí ha tenido conocimiento de los adeudos fiscales a su cargo, toda vez que, incluso, ha hecho valer los medios de defensa que tiene a su alcance, los cuales han resultado favorables a la autoridad fiscal”. Agregó que “…el Servicio de Administración Tributaria siempre actúa con estricto apego a las disposiciones fiscales y la inmovilización de cuentas bancarias es una figura legalmente establecida”…Sólo para recordar, les comentaré que el pasado 12, de este violento noviembre, fue el 368 aniversario del natalicio de la Décima Musa, nuestra querida Sor Juana Inés de la Cruz, originaria de San Miguel Nepantla, municipio de Tepetlixpa, al Oriente del Estado de México y casi colindante con Cuautla, Morelos, para que se ubiquen mejor.

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