Jorge Herrera Valenzuela
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Mucha tristeza hay en nuestro gremio periodístico por el fallecimiento de Pedro Sol, un excelente caricaturista e inolvidable compañero, amigo, padre y abuelo. Para su esposa Paty, su hija Vero y su hijo Javi, un abrazo solidario.
Ciudad de México, 14 de agosto de 2024.- En las competencias olímpicas deportivas, México ha cumplido su primer centenario. Desde 1924 hasta París 2024 nuestro País ha estado representando en 23 ediciones, además de estar presente en 1900 al reanudarse los Juegos Olímpicos en Londres.
Oficialmente no se registró a nuestro País, porque no existía el Comité Olímpico Mexicano. Este se constituyó el 23 de abril de 1923, presidido por Carlos B. Zetina, vicepresidente el general Tirso Hernández, Alfonso Rojo de la Vega, secretario y tesorero, Alfredo T. Cuéllar.
Los VIII Juegos Olímpicos se celebraron precisamente en París, hace un siglo. Entre los 44 Países, estuvo México con 15 deportistas que compitieron en atletismo, tenis y tiro. El sonorense vasconcelista Herminio Ahumada compitió en los 100 metros. Regresaron sin medallas y uno de los 15, F. Cuevas, se ausentó sin dar aviso.
Más historia de 1924
Por primera vez, se usó un logotipo olímpico. Fue la primera ocasión que hubo una Villa Olímpica; a las 136 mujeres las hospedaron en un pueblito alejado “para evitar tentaciones”. Los hombres sumaron un total de 2,959.
El Estadio Olímpico Yves-du-Manoir, abarrotado por 45,000 espectadores que aplaudieron a los futbolistas de Uruguay ganadores de la medalla de oro y vitorearon al nadador Johnny Weismueller, Tarzán, que se llevó tres medallas de oro y una de bronce.
Se espera que haya real apoyo
El domingo pasado terminó la XXXIII Olimpiada, París sede por tercera vez. El río Sena fue el escenario inaugural. Las delegaciones deportivas desfilaron en naves por esas aguas. Primera vez fuera de un estadio exprofeso.
En el curso de la semana estarán de regreso los 46 atletas y las 63 deportistas que integraron la Delegación Mexicana. Muchos de ellos cabizbajos, otros tristes, pero todos con ánimos de superarse, con o sin ayuda del gobierno federal, como ocurrió en este sexenio.
La mayoría de los deportistas olímpicos, tras breve descanso, entrarán de lleno a la preparación para los siguientes eventos internacionales y las Olimpiadas de Los Ángeles, California, del 21 de julio al 5 de agosto de 2028 y la de 2032 en Australia.
Por ahora, las y los deportistas olímpicos tienen la ilusión, el sueño utópico y la esperanza de que la nueva administración les brinde los apoyos necesarios para la preparación y el fogueo internacional que urge para suplir el sacrificio familiar u ocupar su tiempo libre en labores ajenas al deporte, para el sostenimiento del hogar.
En París, las y los mexicanos participaron en 29 de las 32 disciplinas. Es larga la lista de quienes lograron cuartos lugares, en lo individual y por equipos. Las 63 mujeres y los 46 hombres llegaron a los Juegos Olímpicos con el mayor de los optimismos; sin embargo, los estadounidenses y los chinos impusieron sus récords y salieron cargados de oro, plata y bronce.
Para ninguno de nosotros es desconocido que los deportistas amateurs, juveniles y profesionales están marginados de las becas, de la contratación de entrenadores de primer orden, de instalaciones y equipo.
La Conade se convirtió en el enemigo número uno y al Comité Olímpico Mexicano le negaron presupuesto “por ser una entidad privada”, calificada presidencialmente como “corrupto” porque el presidente de México no tuvo bajo su control.
Premios y estímulos a medallistas
Terminó la justa olímpica. De vuelta a casita. Retornar a la rutina. Activarse para lo que viene. Encontrarnos con un futuro. Convertir los sueños en realidades. Bueno, siempre lo pensamos así después de las experiencias adquiridas en la cancha, en la pista, en las albercas y en los estadios. Ya no repitamos “Cayeron con la cara al sol” o “Ya merito y tenía la de oro en su mano”.
Recibamos con entusiasmo a nuestras atletas, a los muchachos que como Emiliano Hernández pusieron todo para ganar, pero uno, dos o tres puntitos lo impidieron al calificar después del tercer lugar.
En esta vez, México sí estuvo en el medallero, lo que no ocurrió en los olímpicos de París 1900 y de París 1924. Subieron al podio los clavadistas Osmar Olvera y Juan Manuel Celaya, por una de plata. Horas antes la judoca Prisca Guadalupe Awiti recibió el aplauso de todo México, ganó la de plata. Una tercera la recibió el carismático joven mazatleco Marco Verde.
Las preseas de bronce penden los cuellos de Osmar Olvera y otra por equipos para las tiradoras con arco Ángela Ruiz, Alejandra Valencia y Ana Vázquez. El trío ganó 6-2 a sus contrincantes de Países Bajos. Habían derrotado a Alemania, pero al final cayeron ante China. Otros momentos alegres, abrazos, sonrisas y felicitaciones, les esperan.
Para empezar el presidente de Mazda México, Miguel Barbeyto, le regaló a Marco Vede un automóvil de lujo, “porque es un orgullo para México el triunfo de Marco”. Se dijo que sus papás “Sammy” Verde y Fabiola Álvarez vendieron su coche para ir a París. El papá fue boxeador olímpico en Barcelona 1992, pero no tuvo éxito.
Habrá premios en efectivo de parte del Doctor Simi, quien a través de su hijo Víctor González Herrera, director de Farmacias Similares, ofreció un millón de pesos para ganadores de presea de oro, medio millón para los trajeran la de plata y 200 mil a los de bronce. Esperamos nos anuncie fecha y lugar de la ceremonia.
Del dinero “robado y que devolvió el gobierno de Estados Unidos a México” en Palacio Nacional citarán a los medallistas olímpicos para entregarles dos millones de pesos a cada uno de quienes obtuvieron el segundo lugar, los subcampeones y un millón de pesos para las tiradoras de Arco y para Osmar Olvera, pues también recibió el bronce en una prueba individual.
Preciso, esos millones de pesos se toman de una suma no revelada correspondiente al dinero confiscado al tesorero del gobierno coahuilense del priista Humberto Moreira Valdés. Nada tiene que ver la dueña de la Conade en la premiación, cuya única medalla olímpica de plata, la obtuvo en Atenas 2004.
78 medallas en 92 años
La crítica negativa no encaja en mi lenguaje, cuando abordamos temas que históricamente dan margen a ello. Alguna vez escuché al profesor Filiberto Navas Valdez, destacado deportista toluqueño del siglo pasado, afirmar que “los deportistas mexicanos son hijos de mal comidos y bien bebidos”. Tal vez, su aseveración tenía algún fundamento; sin embargo, lo que hace falta es la dirección directa y personal, el apoyo real y efectivo, a la juventud que ama el deporte.
México, como lo he comentado, es de las naciones que están permanentemente en los Juegos Olímpicos. Los resultados no son los deseados, pero debemos de ser congruentes y seguir políticas como las de los países donde los deportistas obtienen su salario al dedicar, las horas laborales, a prepararse en el deporte elegido.
En los 92 años, contados a partir de 1932, el medallero olímpico señala que México tiene en sus vitrinas 13 de oro, 27 de plata y 38 de bronce, ya incluidas las tres de plata y las dos de bronce alcanzadas en París 2024.
La cosecha más redituable se dio precisamente en México 68: la aurea fue para Felipe “El Tibio” Muñoz y para los boxeadores Ricardo Delgado y Antonio Roldán. Los segundos lugares, plata, correspondieron a José “El Sargento” Pedraza, para el clavadista Álvaro Gaxiola y la esgrimista Pilar Roldán, primera mexicana triunfadora en una Olimpiada. Recibieron la de bronce, en esos mismo México 68, la nadadora María Estela Ramírez y los boxeadores Joaquín Rocha y Agustín Zaragoza.
En los primeros 24 años del Siglo XXI, los resultados nos dejaron un mal sabor de boca. Tres medallas de oro, 24 de plata y 22 de bronce. El mejor año fue el 2012 en Londres, los futbolistas de soccer ganaron a Brasil, la de oro.
Antes, en Sídney 2000, la mexiquense Soraya Jiménez fue la primera mexicana que conquistó una medalla de oro. Compitió en halterofilia. La sinaloense de 21 años de edad María del Rosario Espinoza, en taekwondo, salió victoriosa, con medalla de oro, en Pekín 2008, la segunda deportista en la lista de galardonadas por su esfuerzo.
Catón, siempre acertado
El columnista que afirma tener sólo cuatro lectores, una vez más pegó un batazo de cuatro esquinas y, sin su permiso, copio su comentario publicado el pasado sábado 10 y que a la letra leemos:
“López Obrador dice estar contento por el desempeño de nuestros deportistas en la Olimpiada de París. Ningún motivo tiene para sentir tal satisfacción. Quienes nos representaron en esas competencias no recibieron apoyo de la 4T, que, al parecer, tiene ya vacías sus arcas después de que el caudillo ha rasguñado hasta el último centavo para pagar el costo de sus obras megalómanas…Bien conocido es el caso de las jóvenes que se vieron obligadas a ofrecer en venta sus trajes de baño a fin de recabar los fondos necesarios para asistir a sus competencias.
Y remata don Armando Fuentes Aguirre, orgulloso saltillense: “Ni Ana Guevara ni Amlo deben apropiarse el mérito de quienes han ganado a pulso sus medallas, gracias a su propio esfuerzo”.
