Washington, D. C., 16 de agosto de 2021.- Julio Paz estaba tan desesperado por un trabajo que intentó sin éxito migrar a Estados Unidos tres veces, pero luego encontró una mejor manera.
Paz, que es de Guarita en el departamento de Lempira en Honduras, estudió informática en la escuela secundaria, pero esto no fue suficiente para encontrar empleo. Deseaba continuar sus estudios en una universidad, pero su familia no podía permitirse cubrir la vivienda, el transporte, los suministros educativos y otras necesidades.
Sin embargo, Paz estaba decidido a tener éxito en el apoyo a su familia y comunidad.
Describió su proceso de pensamiento: “¿Qué voy a hacer? No tenía muchas esperanzas de conseguir un trabajo, porque siempre requerían experiencia educativa y laboral. Esa fue una de las razones por las que decidí irme. Como siempre quise aprender un segundo idioma, pensé que tal vez Estados Unidos era mi oportunidad para eso”.
Justo antes de que decidiera dirigirse al norte en 2017, se encontró con un programa apoyado por Usaid en su ciudad natal.
Paz se unió al Programa de Pasantías para la Inclusión de Gobernanza Local de Honduras de Usaid, diseñado para ayudar a jóvenes vulnerables como él a obtener experiencia laboral formal en la región centro-occidental de Honduras.
Esperanza para uno, esperanza para la comunidad
Después de terminar la pasantía, Julio solicitó un puesto de asistente de Monitoreo y Evaluación (M&E) de tiempo completo en el programa de Gobernanza Local Hondureña de Usaid y ahora, a los 24 años, trabaja en una oficina regional en Copán.
“Tener ingresos me permitió desarrollar una carrera y mantener a mi familia”, dijo. “Logré independizarme de la casa de mis padres en Guarita, Lempira, y convivir con compañeros de mi edad, lo que nos hizo crecer juntos en un momento importante de nuestras vidas”.
En 2019, fue seleccionado para participar en el programa Diplomado en Derechos Humanos y Migración Forzada, patrocinado por la Fundación Internacional de Seattle y Cristosal en El Salvador. Ese mismo año, se le pidió que asistiera a la Conferencia de Juventud y Migración en la Ciudad de México. Y a principios de 2020, nuevamente fue invitado a representar a Honduras en la misma conferencia, pero esta vez en Tijuana, México.
El viaje continúa
Como asistente de M&E, Julio apoya el trabajo de Usaid promoviendo el emprendimiento juvenil y el desarrollo económico en el occidente de Honduras.
A través de este proyecto, desde 2017–19, Usaid apoyó a más de 70 jóvenes del occidente de Honduras y Tegucigalpa para adquirir competencias y encontrar trabajo en sus comunidades locales. Estas nuevas oportunidades mejoran no solo sus propias vidas, sino también las de sus familias y comunidades.
Julio ejemplifica compromiso y resiliencia. Él trazó su propio viaje y no miró hacia atrás. Su futuro luce más brillante en Honduras.
Una versión de este artículo titulada “Un camino de perseverancia: Aumentando las posibilidades de éxito de los jóvenes hondureños brindándoles capacitación y experiencia laboral para fomentar sus habilidades” está publicada en Medium.
