Washington, D. C., 29 de junio de 2020.- Aunque los gobiernos informaron mayor número de condenas por trata de personas y menor número de víctimas de trabajos forzados identificadas durante el año 2019, algunos gobiernos están actuando ellos mismos como traficantes, según un informe del Departamento de Estado.
El Informe de 2020 sobre la trata de personas, publicado el 25 de junio, evalúa esfuerzos para combatir la trata de personas en 188 países y territorios, incluyendo Estados Unidos.
“La trata de personas, que incluye el trabajo forzoso y el tráfico sexual, ocurre a nuestro alrededor, incluso aquí en Estados Unidos”, dijo el secretario de Estado, Michael R. Pompeo. “Hay 25 millones de adultos y niños que sufren de tráfico laboral y sexual en todo el mundo”.
La trata de personas es “un acto verdaderamente malvado”, dijo.
China está obligando a la gente a trabajar en su iniciativa de “la Franja y la Ruta” en todo el mundo, además de su conocida detención y trabajo forzado de las minorías musulmanas en Sinkiang. El trabajo forzado en las misiones médicas del gobierno cubano puede afectar a hasta 50,000 médicos que operan en más de 60 países.
El informe también encontró que varios países están ofreciendo suspensión de sentencias o multas en lugar de penas de prisión. Esto no resulta en un castigo significativo para los traficantes condenados.
En un acto que marcó la publicación del informe, Pompeo, la asesora del presidente Ivanka Trump y el embajador John Cotton Richmond, que dirige la Oficina del Departamento de Estado para vigilancia y lucha contra la trata de personas, reconocieron a 10 personas como “Héroes del Informe sobre trata de personas” por su labor de lucha contra esta:
• La teniente coronel Karma Rigzin es una de las principales defensoras de la lucha contra la trata en Bután. Ha elevado la investigación de la trata de personas a un objetivo central en la División de Protección de la mujer y el niño de la Real Policía de Bután que ella dirige.
• La labor de Ary Varela, fiscal público, y Natalino Correia, miembro de la Policía Judicial, dio lugar al primer caso oficial de trata de personas en Cabo Verde en el que el Gobierno procesó a los acusados por delitos de trata de personas.
• Reda Shoukr ayuda a cientos de víctimas de la trata en Egipto cada año a obtener asistencia jurídica, servicios sociales, apoyo psicológico y formación profesional a través del Instituto Al-Shehab de Promoción y Desarrollo Integral que ella misma fundó.
• Al tiempo que representaba a los supervivientes de la trata como profesional de derecho público desde 2015, Patricia Ho sensibilizó a la opinión pública sobre la necesidad de una ley sobre la trata de personas en Hong Kong y abogó por un mejor trato a las víctimas.
• Nina Balabayeva estableció y financió una organización no gubernamental en Kazajistán dedicada a la lucha contra la trata de personas que, además, sirve de refugio a las víctimas de la trata de personas y ha ayudado a más de 16,000 personas.
• Sophie Otiende estableció las estructuras para el primer refugio dedicado exclusivamente a las víctimas de la trata en Kenia y dirigió la elaboración de principios prácticos regionales para ayudar a las víctimas de la trata. Desde 2014, ha prestado asistencia a más de 400 víctimas dentro y fuera de Kenia.
• En su calidad de coordinadora nacional sobre la trata de personas en el Gobierno de Letonia, Lāsma Stabiņa ayudó a la Unión Europea a aumentar el escrutinio de los matrimonios ficticios, un aspecto de la trata que se ha pasado por alto. Encontró fuentes de financiación innovadoras que permitieron continuar la labor de lucha contra la trata a pesar de las graves limitaciones presupuestarias.
• Como uno de los principales impulsores de la aprobación de la Ley sobre la trata de personas de Malaui en 2015, Maxwell Matewere sigue abogando por su plena aplicación. Fundó una organización no gubernamental dedicada a la promoción, investigación y protección de los derechos del niño.
• Oxana Alistratova, de Moldavia, que estuvo a punto de convertirse en víctima de la trata de personas, fundó la primera organización no gubernamental para concienciar sobre la trata de personas en Transnistria, convenciendo al mismo tiempo a los funcionarios locales de que aprobaran leyes contra la trata. Administra una línea telefónica de ayuda para las víctimas de la trata y otra para las víctimas de la violencia doméstica.
“Este año marca un hito en nuestra lucha contra la trata de personas”, dijo Ivanka Trump, señalando que han pasado 20 años desde que se promulgó la Ley de protección de las víctimas de la trata. El presidente Trump y la administración están profundamente comprometidos a continuar “la lucha contra la trata de personas en todas sus formas grotescas y malvadas”.
