Washington, D. C., 4 de mayo de 2021.- Llegan a casa desde la escuela con pruebas para calificar, como hacen los docentes en todas partes.
Pero para Jill Biden, su vivienda es la Casa Blanca, y para Douglas Emhoff, es la residencia vicepresidencial en el Observatorio Naval.
Cuando en Estados Unidos se celebra la Semana de Aprecio a los Docentes (del 3 al 7 de mayo), la Sra. Biden (esposa del presidente Biden) y el Sr. Emhoff (esposo de la vicepresidenta Kamala Harris) son muestra de un par de docentes de alto perfil al cual los estudiantes están agradecidos.
Los compromisos de la primera dama y del segundo caballero reflejan la importancia que los estadounidenses asignan a la educación de las generaciones futuras.
Durante décadas Biden ha sido profesora de un colegio comunitario y sigue enseñando aun siendo primera dama. También trabajó durante la vicepresidencia de su esposo durante el mandato del presidente Barack Obama.
En una entrevista con la revista People Magazine en 2016, la entonces primera dama Michelle Obama destacó el haber visto a Biden trabajar cuando viajaban volando juntas por el país en representación de la Casa Blanca. “Jill está siempre calificando tareas, es muy diligente”.
Biden, que tiene un doctorado en educación, ha sido profesora desde 1976. “Enseñar no es solamente lo que hago, es lo que soy”, indica su biografía en la Casa Blanca.
Al enseñar este semestre tres cursos de inglés en el Colegio Comunitario del Norte de Virginia, es la primera esposa de un presidente en el cargo que trabaja a tiempo completo fuera de la Casa Blanca.
Según CBS News, la Sra. Biden dijo en un correo electrónico enviado a sus colegas en enero, “estoy tratando de mantener separados mis papeles, como lo hice siendo segunda dama… Quiero que mis estudiantes me vean primero como a su profesora de inglés. En mis clases no menciono para nada ser primera dama. Gracias por respetar mi identidad de profesora”.
Ella no es la primera esposa en la Casa Blanca con credenciales de educadora.
Karen Pence (esposa del exvicepresidente Mike Pence) enseñó a tiempo parcial en una escuela privada cristiana durante la vicepresidencia de Pence y durante su paso por el Congreso. (Hace poco retornó a enseñar arte.)
Michelle Obama fue decana adjunta para servicios estudiantiles en la Universidad de Chicago antes de ser primera dama.
Laura Bush, esposa del presidente George W. Bush, inició su carrera como maestra de escuela elemental y luego se hizo bibliotecaria y una firme partidaria de la lectura. “Yo sé cuán gratificante y cuán desafiante puede ser la enseñanza y qué gran diferencia puede hacer un maestro en la vida de un niño”, dijo en una ceremonia de homenaje a los maestros. La Sra. Bush, que a los ocho años de edad ya sabía que quería ser maestra, ya siendo primera dama todavía podía asombrar a un grupo de niños cuando les leía un texto.
Emhoff, el primer “segundo caballero” del país, se decidió a la enseñanza para estar conectado con su carrera mientras cumple su papel ceremonial. Era abogado en California, especializado en espectáculos y entretenimiento, antes de pedir licencia durante la campaña política de su esposa, y renunció a su puesto luego que ella tomara posesión del cargo.
Esta primavera, Emhoff enseña derecho en la Facultad de Derecho de la Universidad de Georgetown.
“Miren, es raro que el segundo caballero sea su profesor”, dijo de sus alumnos. “Pero como que ya ha pasado. Tal vez, fueron cinco minutos en la primera clase. Ahora, lo único que quieren es aprender, quieren ser buenísimos abogados y yo trato de impartir mis experiencias como abogado”. (Emhoff hizo la declaración a unos reporteros luego de un acto para presentar el plan de auxilio económico de la Casa Blanca para Covid-19 -en inglés-, según People Magazine).
Enseñar es parte de las charlas en la familia Harris-Emhoff. “En la cena nos preguntamos [unos a otros] cómo te fue hoy”, dijo Emhoff. “Hablo sobre cómo está yendo, de cómo estoy tratando de captar la atención de los estudiantes y de cómo responden”.
Durante la semana del 3 de mayo muchos estudiantes de Estados Unidos escribirán una nota de agradecimiento a sus docentes, gesto que tendrá mucho significado para estos, ya sea que vivan en Washington o en otro lugar de Estados Unidos.
