Ciudad de México, 6 de enero de 2021.- La crisis climática es el principal reto al que se enfrentan los seres humanos, ya que la protección del medio ambiente es una tarea que debe ser atendida de inmediato. Organismos gubernamentales, fundaciones, grandes, medianas y pequeñas empresas deben aplicar estrategias y dosificar sus actividades para disminuir el impacto ambiental negativo que sus operaciones pueden llegar a provocar.
Además de ser una actividad necesaria para la preservación del planeta, aplicar estrategias sustentables hace a las empresas más rentables y comprometidas. Para hablarnos de este tema, Dots, plataforma mexicana enfocada en soluciones de tecnología mediante la economía circular, nos platican cómo podemos hacer a nuestra empresa más sustentable:
1. Ahorro de recurso: Disminuir el consumo de energía es posible mediante una planeación estratégica de uso y distribución, esto no solo contribuirá al bienestar medioambiental, sino que los costos serán más asequibles. Buscar nuevas alternativas de fuentes renovables y hacer uso máximo de la luz natural podrían ser algunas alternativas.
2. Reutilización de tecnología: Durante 2018 se generaron 50 millones de toneladas de residuos tecnológicos. Dar una segunda vida a los recursos permite disminuir la cantidad de desechos que una empresa genera y es que, debido a la rotación de equipos de cómputo obsoletos, las compañías optan por deshacerse de ellos. Para evitar esto, empresas como Dots buscan disminuir el impacto ambiental tecnológico mediante la renta de computadoras a empresas medianas y grandes, lo que reduce en gran medida la cantidad de desechos y mejora la rentabilidad de las compañías al no enfrentarse a gastos excesivos por la compra de equipos.
3. Reciclaje: Esta es una de las responsabilidades sociales más importantes y es que éste tiene diversos beneficios como disminuir energía, evitar el desgaste de recursos y reducir la contaminación.
El cuidado del planeta es tarea de todos. En conjunto, asociaciones, gobierno, empresas y emprendedores debemos modificar las prácticas nocivas para buscar alternativas que no solo logren la preservación del medio ambiente, sino que coadyuven a mejorar las actividades empresariales y el bienestar de los colaboradores.
