Washington, D. C., 9 de octubre de 2018.- Una cría de elefante en el Parque Nacional de Nairobi en Kenia estaba ansiosa por conocer a Melania Trump en la última escala del viaje relámpago de la primera dama a través del Continente Africano.
La cría bebió la fórmula de la enorme botella que sostenía la primera dama, luego se sacudió y dio un brinco que hizo que la primera dama se sonriera. La Sra. Trump acarició a uno de los animales ya grandes en las instalaciones de rescate del fondo para la conservación de la vida silvestre David Sheldrick y después dio un recorrido de safari por el parque en un vehículo descubierto durante una visita el 5 de octubre.
Observó con binoculares a los hipopótamos, una jirafa, impalas y otros animales; tomó fotos con su teléfono, y se detuvo en el sitio donde los guardaparques han quemado 95 toneladas métricas de marfil para desalentar el comercio ilegal de colmillos de elefante.
Más tarde, niños que bailaban y cantaban recibieron a la Sra. Trump en su casa, llamada “The Nest” (El Nido), un hogar para bebés y niños en edad escolar cuyas madres están en la cárcel. Allí, cargó bebés y distribuyó mantas con el lema de su campaña “Be Best” (sé mejor).
Era el cuarto día de su gira por cuatro países para fomentar la salud y bienestar infantil así como la educación y la conservación. También está mostrando el trabajo humanitario de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional.
Junto con la primera dama de Kenia, Margaret Kenyatta, asistió a un espectáculo de danza y canto de niños y adolescentes en el Teatro Nacional de Nairobi. La última vez que las primeras damas se reunieron fue en Washington el 27 de agosto, cuando el presidente y la primera dama keniatas plantaron un árbol en el jardín de la Casa Blanca. Kenyatta tiene su propia iniciativa “Beyond Zero” (Más allá de cero) para mejorar la salud materna e infantil.
La Sra. Trump concluirá este fin de semana su gira por África en la capital de Egipto. Anteriormente visitó Ghana y Malaui.
