Ciudad de México, 23 de octubre de 2020.- México celebra la emisión de su primer bono social con perspectiva de género desde la banca pública y su colocación ‒la primera en su tipo realizada por una entidad financiera del gobierno federal en el mercado bursátil mexicano‒, fue realizada por los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (Fira), conjunto de fideicomisos originados en el Banco de México y en donde funge como fideicomitente la Secretaria de Hacienda y Crédito Público, y como fiduciario el Banco de México.
Durante la ceremonia, realizada ayer, en el denominado “Grito Biva”, como se le conoce tradicionalmente a la celebración de la colocación de bonos realizados a través de la Bolsa Institucional de Valores (Biva), participaron Irene Espinosa, subgobernadora del Banxico; María Araiza, directora general de Biva; Belén Sanz, representante de ONU Mujeres México; Nadine Gasman, presidenta de Inmujeres, México; Verónica Zavala, gerente del Departamento de Países de Centroamérica, Haití, México, Panamá y República Dominicana del BID, y el director general de Fira, Alan Elizondo Flores.
En su intervención para dar apertura al evento, Araiza señaló la importancia de este primer bono social de género en México por parte de Fira, cuyo monto dijo, fue de 3,000 millones de pesos, con una suscripción de demanda por parte de los inversionistas que casi cuadruplicó el monto ofrecido y con una tasa que incluso se situó en niveles precovid-19 con TIIE +27 pb.
Este bono, destacó, forma parte de 3 emisiones de un programa autorizado de cien mil millones de pesos, las otras por 1,400 millones de pesos y 5,600 millones de pesos, lo que representa un parteaguas para el mercado bursátil mexicano en lo que a los criterios ASG se refiere.
Espinosa señaló que la emisión de este primer bono de género representa un hito histórico que, en el marco de la pandemia, cambió el paradigma hacia modelos que generen mayor inclusión y que toman en cuenta la vida social, la vida de las mujeres y su contribución económica en el país. Desde el Banco de México, dijo, estamos impulsando muy fuertemente la adopción de los criterios ambientales sociales y de gobernanza como un principio básico para el funcionamiento del sistema financiero.
Asimismo, en mensaje virtual desde Washington, Zavala, señaló que “desde el Grupo BID estamos convencidos de que la banca de desarrollo puede y debe jugar un papel importante en cerrar las brechas de igualdad de género en el sector financiero, por eso, además de apoyar a FIRA en este primer bono en el sector público, hemos participado anteriormente en la emisión de bonos de género por bancos comerciales en Panamá y Colombia. Todo con un mismo objetivo: catalizar recursos para expandir la frontera de financiamiento a las mujeres empresarias y, al mismo tiempo, promover las mejores prácticas para atenderlas y contribuir a varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible”. Por parte del BID asistió como testigo de honor del lanzamiento el representante de la institución en México, Roberto Manrique.
Sanz indicó que esta emisión evidencia la puerta que se abre hacia nuevas oportunidades para el empoderamiento de las mujeres mexicanas. El financiamiento innovador, como lo es un Bono con perspectiva de Género, afirmó, ayuda a acortar las brechas para la implementación de la agenda 2030 con uno de sus objetivos que es la reducción del hambre, siendo las mujeres una de los canales que dispersan de manera directa el beneficio desde el hogar, por lo que Naciones Unidas, tiene un enorme interés en acompañar a los países con iniciativas ésta e insta a otros a replicar lo que hoy Fira hace.
En representación del Instituto Nacional de las Mujeres, Gasman, señaló que el acceso de las mujeres a los recursos financieros es aún una asignatura pendiente sobre todo en los ambientes rurales e indígenas ya que solo el 27% de las mujeres en el ambiente agrícola son titulares o ejidatarias y comuneras, en contraposición del 73% de los hombres en situación similar, lo que dificulta su acceso al crédito. En ese sentido, felicitó la gran aportación del Bono Social de Género de Fira, reconociendo con ello el avance que representa en la igualdad de género, como tema de justicia social y eficiencia económica.
Para cerrar el evento y agradecer el interés y apoyo de las instituciones presentes, Elizondo Flores destacó que, si bien Fira cuenta con una amplia base y saldo de cartera de acreditadas mujeres, lo que va a distinguir a los créditos que respaldarán este bono, es que se trata de financiamientos otorgados exclusivamente a mujeres en lo individual o en grupos.
“Para Fira, dijo, es una obligación romper desigualdades de género y abrir oportunidades. Es un día histórico y de gran gala, porque logramos nuestro objetivo de que la sociedad y los inversionistas volteen a ver la necesidad de invertir en el desarrollo de las mujeres”.
Hoy 6 de cada 10 personas que producen bienes alimentarios en países en desarrollo, son mujeres; Sin embargo, generan de 33 a 66 por ciento menos ingresos y entre las asimetrías más importantes que presentan para acceder a un crédito, se encuentra el que sólo el 20% de ellas cuenta con la tenencia de su propiedad, lo que implica importantes dificultades para que ellas puedan abrir canales comerciales, puedan acceder a insumos, infraestructura y mano de obra que necesitan para ser apalancadas con un crédito.
La propuesta de Fira detrás del bono, es lograr abrir canales comerciales y llevar insumos esenciales, mejorar los estándares tecnológicos y, por supuesto, llevar el financiamiento a través de una red de 80 intermediaros financieros con los que opera la Institución y que cuentan con experiencia en el modelo agrícola.
Por último y tras reconocer el trabajo conjunto realizado gracias a la confianza de los inversionistas, del Banco de México, de la Secretaría de Hacienda, así como la participación del BID en el desarrollo del marco de referencia para realizar esta emisión, concluyó que, con este mecanismo, Fira busca dar mayor visibilidad a las necesidades de autonomía económica de las mujeres emprendedoras y empresarias en el sector alimentario y el medio rural.
