¡Adiós Palmera mía!

0
55

Ciudad de México, 25 de abril de 2022.- Con bailes, música y cantos los habitantes de la Ciudad de México despidieron ayer a la palmera que adornaba una de las glorietas del Paseo de la Reforma, una de las principales vialidades de la Ciudad de México que la divide entre norte y sur.

La Palma de Reforma, como popularmente se le conocía, contaba con unos 104 años de existencia y constituía un símbolo para des azoa capitalina, en la glorieta ubicada entre las glorietas del Ángel de la Independencia y la de Cuauhtémoc.

Un entomólogo del Colegio de Posgrados (Colpos), informó que tras las muestras que tomaron de hojas, tronco y raíz de la palma, los resultados arrojaron hongos que provocan que el agua no circule en todo el tronco y se seque, por lo que se decidió arrancarla de este sitio para, posteriormente, seccionarla y trata de trasplantarla en un vivero Nezahualcóyotl, ubicado en la Alcaldía de Xochimilco, al sur oriente de la Ciudad de México. El lugar que dejó la mítica palmera será ocupado por otro árbol o planta que será elegida por los habitantes de la Ciudad de México.

El retiro de la palmera se realizó por 40 trabajadores de apoyo, dos grúas hidráulicas, personal de limpia y policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), quienes empezaron a laborar a las 10 de la noche de ayer terminaron alrededor de las 4 de la mañana de hoy.

“No fue una decisión de quitarla la palma, tuvo una enfermedad. Los árboles tienen una vida nacen y mueren igual que nosotros en particular las palmas de este tipo que son de las Islas Canarias pueden llegar a tener 200 años de vida, aquí 2,400 m de altura y con las condiciones de contaminación y que no son nativas de la cuenca, están sujetas a distintas enfermedades. La palma que está muerta no se puede quedar en este lugar, es muy riesgosa para la población”, dijo la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum.

“Los expertos, nos dijeron que era mucho mejor trocear y eso permitirá también que los artistas la puedan intervenir para dejar una obra muy linda”, dijo Marina Robles, secretario de Medio Ambiente de la Ciudad de México.

La palmera tiene una corona hacia arriba donde estaban las hojas, después tiene un tronco que se llama stipe, el corte se amarra desde arriba para abajo, primero la corona y después va a haber otros dos cortes en medio y abajo con eso completamos el derribo, dijo Rafael Obregón, director general de Sistemas de Áreas Naturales Protegidas. La madrugada de este lunes, 30 trabajadores del Gobierno de la Ciudad de México y de la empresa “Reactor ingeniería”, retiraron la emblemática palmera.

Vivió pasajes revolucionarios
En la modernización de la Ciudad de México, el desarrollo financiero, esta palmera, fue testigo de importantes movilizaciones sociales como las marchas estudiantiles de 1968, los festejos en los mundiales de 1970 y 1986 y eventos automovilísticos de la Formula 1. En estos 100 años de vida, la palmera alcanzó 23 metros de altura y 18 toneladas de peso.

Esta palmera ha tenido mucha historia, ha salido y fotografías desde 1920 donde se ha visto que ya medía 2 metros, ya cumple más de un siglo, se especula que desde la Revolución fue plantada”, dijo Shade Juárez.

Era una arecáceas
Las arecáceas son una familia de plantas monocotiledóneas, la única familia del orden Arecales. Normalmente se las conoce como palmeras o palmas. Los individuos de esta importante familia son fáciles de reconocer visualmente, aunque puede haber confusión con especies de las familias Cycadaceae y Zamiaceae debido a las similitudes morfológicas. Son plantas leñosas. A pesar de ser monocotiledóneas muchas de ellas son arborescentes, con grandes hojas en corona al final del tallo, generalmente pinnadas o palmadas. Sus flores poseen 3 sépalos y 3 pétalos, y se disponen en inflorescencias provistas de una o varias espatas. El fruto es carnoso: una baya o una drupa. Están ampliamente distribuidas en regiones tropicales a templadas, pero principalmente en regiones cálidas.

El 18% de las palmas del mundo viven en México y las del género Chamaedorea son las palmas más abundantes de las selvas tropicales del Continente Americano, donde crecen 130 de estas especies, de las cuales 50 son nativas de México que muy probablemente sea uno de los centros de diversificación del género, refiere la Comisión Nacional de Biodiversidad (Conabio).

De acuerdo con la información oficial se estima que actualmente hay 15 mil palmeras en la Ciudad de México y que alrededor del 25% de ellas tiene algún tipo de plaga. Tras las explicaciones brindadas por los expertos, Sheinbaum Pardo dijo que dicha palma en particular no pudo ser salvada.

Y es que, al menos para la Ciudad de México, dicha especie se ha vuelto un elemento importante del escenario citadino debido al proceso histórico al que ha acompañado puesto que se cree que estas especies, las cuales no son nativas del territorio mexicano, llegaron en el siglo XX.

Anuncio

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí