El tema de la vialidad en la Ciudad de México (Cdmx) tal parece que no es importante para Miguel Ángel Mancera, jefe del Gobierno de la Ciudad de México (Gcdmx), porque su Programa Integral de Movilidad ha sido un fiasco.
Los capitalinos siguen sufriendo las inclemencias de un servicio de transporte cada vez más pésimo y aún más peligroso, así como no ha servido –porque no saben cómo aplicar dicho programa-, para aminorar el uso del automóvil por parte de particulares.
Por lo tanto, es obligado que las autoridades responsables directamente de este fracaso –Héctor Serrano, secretario de Movilidad-, entiendan que urge redoblar esfuerzos y mejorar los servicios de transporte que han sido insuficientes para aminorar el uso de vehículos particulares al no poder considerar el transporte público como una buena opción para sus traslados.
En una palabra, debe cambiar sus acciones para agilizar la movilidad.
El diputado de Movimiento Ciudadano (MC) en la Aldf, Armando López Campa, alertó que la Ciudad de México ocupa el primer lugar en saturación de vehículos en vías primarias y secundarias, lo que conlleva que los capitalinos pierdan centenares de horas al mes, en traslados.
“Es urgente revisar las acciones del Programa Integral de Movilidad de la Ciudad, dijo, al momento de recordar que la pérdida de tiempo en el tráfico citadino, invariablemente redunda en un deterioro de su calidad de vida. “Influye en su estado de ánimo, en los tiempos laborales, tiempo extra por viaje y distancias recorridas, entre otros”, indicó.
Explicó que un estudio de la empresa TOM TOM, dedicada al análisis del tráfico de vehículos en el mundo, arrojó que se pierden unas 227 horas al año en vialidades, por lo que urgió a redoblar esfuerzos y mejorar los servicios de transporte.
Agregó que no basta con poner en duda la conflictividad que existe para circular en la Cdmx, tan sólo con salir entre las 6:00 y las 9:00 horas; las 14:00 y 16:00 horas y las 18:00 y 21:00 horas, se pueden constatar los avatares de la congestión de automotores.
Indicó que se debe trasformar la movilidad en nuestra ciudad para reducir los traslados en vehículos particulares mediante la promoción y disposición de opciones viables y sustentables que permitan la movilización de personas, escalonamiento de horarios laborales y, por supuesto, alternativas de trabajo que incidan en la cercanía de los hogares de los trabajadores con sus centros laborales.
