En enero de 2018, los mosquitos de la variedad Aedes aegypti desarrollados en
laboratorio como portadores de la bacteria wolbachia, fueron liberados en el Sur de Miami, Florida.
Fue la primera fase del Programa de Pruebas de Reducción de Mosquitos en el Condado de Miami-Dade, que tuvo como objetivo un área de tratamiento de media milla cuadrada, donde se liberaron mosquitos modificados, junto con un área de control correspondiente dentro de la ciudad.
Después de hacer este monitoreo inicial, se liberará una mayor cantidad de mosquitos portadores de wolbachia en el Sur de Miami cada semana, durante varios meses -en total, 666 millones de especímenes– con el objetivo final de reducir las poblaciones de mosquitos y su potencial para la transmisión de enfermedades.
El proyecto es dirigido por la División de Control de Mosquitos y Gestión de Hábitat del Condado de Miami-Dade, en colaboración con MosquitoMate, Inc., la empresa que desarrolló esta tecnología.
Ya se han realizado pruebas en Key West, Florida (aunque debido al huracán Irma, los resultados aún están pendientes), Kentucky, California y Nueva York. En los últimos años, el interés de liberar mosquitos de laboratorio ha llegado a su punto máximo, en respuesta al temor causado por el virus del zika que, desde entonces, ha disminuido en los Estados Unidos.
Si su objetivo era evitar el zika, los funcionarios del gobierno no han actuado de manera oportuna. Aunque el condado de Miami-Dade fue designado previamente como zona de alerta de zika, esa designación fue eliminada el 2 de junio de 2017.
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), durante el 2018, no se han notificado casos de brote de la enfermedad del virus del zika en los Estados Unidos; mientras que en 2017 sólo se informaron 4 casos de virus del zika, supuestamente adquiridos a través de mosquitos de áreas locales (2 en Florida y 2 en Texas).
Si el virus del zika ni siquiera circula en el área, no está claro cómo el gobierno planea medir el «éxito» de la liberación de estos mosquitos para poder determinar definitivamente si es o no de utilidad. Como mínimo, esta es una peculiar sincronización de hechos, a menos que haya algunos beneficiarios desconocidos y ocultos.
Curiosamente, Daily Mail informó que: «Durante el verano pasado, MosquitoMate también colaboró con Verily Life Sciences, una división de la empresa matriz de Google Alphabet Inc, junto con el Consolidated Mosquito Abatement District en el Condado de Fresno, para liberar los mosquitos infectados con bacterias en Fresno, California».
¿Cuáles son los mosquitos portadores de wolbachia, creados en laboratorio?
Los mosquitos machos de MosquitoMate desarrollados en laboratorio están infectados con la bacteria wolbachia, que se produce de forma natural en hasta el 60 % de las especies de insectos, al contrario del mosquito de la variedad Aedes aegypti.
Cuando los mosquitos machos portadores de wolbachia se aparean con hembras en la naturaleza (que no son portadoras de la bacteria), los huevos resultantes no eclosionan, lo que significa que, en última instancia, debería disminuir el número de mosquitos de la variedad Aedes aegypti presentes en la zona.
Los mosquitos machos no pican a los seres humanos, sino que se alimentan del néctar de las flores. Las hembras son los que requieren alimentarse con sangre para desarrollar y poner sus huevos.
En el mejor de los casos, su picadura puede causar una picazón molesta y, en el peor de los casos, puede transmitir enfermedades graves, tales como malaria, fiebre amarilla, dengue, encefalitis, chikungunya y virus del Nilo Occidental. Esta es la razón por la cual MosquitoMate solo libera mosquitos machos.
Dicho lo anterior, en el caso de los mosquitos portadores de wolbachia, una vez que son liberados (lo cual ya ha ocurrido), no hay forma de evitar que se mezclen con los mosquitos silvestres. Si bien, esto podría ayudar a reducir la propagación de ciertos virus (aunque todavía necesita ser constatado), también podría tener otras consecuencias indeseadas, aún desconocidas.
Asimismo, en 2017, se liberaron mosquitos infectados con la bacteria wolbachia en Brasil y Colombia, como parte del programa de investigación para Erradicar el Dengue, un proyecto de $ 18 millones de dólares financiado en parte por la Fundación Bill y Melinda Gates.
Desde 2011, los mosquitos modificados fueron analizados por medio de pruebas abiertas en comunidades afectadas por dengue, pero no al nivel de las pruebas de 2017, que liberaron insectos en áreas urbanas grandes y densamente pobladas.
Los investigadores tardaron décadas en descubrir cómo introducir la bacteria wolbachia en los huevos del mosquito Aedes, pero una vez que lo hicieron comenzaron a experimentar con liberarlos en la naturaleza.
Las pruebas de campo sugieren que la bacteria se propagó en la gran mayoría de los mosquitos locales, y como indicó Eliminate Dengue, es un sistema «autosostenible» –que al mismo tiempo constituye el tema y el problema.
No existe ningún mecanismo que respalde los portadores de wolbachia
En algunos casos, los mosquitos de laboratorio y experimentales han sido diseñados genéticamente para morir en ausencia del antibiótico tetraciclina (que se introduce en el laboratorio con el fin de mantenerlos vivos el tiempo suficiente para que puedan reproducirse).
Fueron diseñados de esta manera al suponer que no tendrían acceso a ese medicamento en la naturaleza, como mecanismo a prueba de fallas (aunque no es perfecto, especialmente dado que los antibióticos han aparecido en las vías fluviales), para asegurarse de que los insectos transgénicos, teóricamente, puedan ser eliminados del medio ambiente, en caso de ser necesario.
Este no es el caso con los mosquitos portadores de wolbachia, ya que ahora que están en libertad; no hay vuelta atrás. Si bien, el programa de MosquitoMate sobre mosquitos portadores de wolbachia sólo involucra insectos machos, existen otros programas que liberan tanto a hembras como machos portadores de la bacteria.
Uno de ellos es el Programa Mundial de Mosquitos, ya que indica un posible problema con el enfoque de sólo utilizar machos: «Esta técnica requiere la liberación de una gran cantidad de mosquitos machos para reducir la población total de mosquitos.
Al igual que con los insecticidas, esta técnica requeriría implementarse de nuevo en el futuro, a medida que la población de mosquitos regresará de forma gradual».
También, hay posibles consecuencias en el ecosistema, que podrían suscitarse cada vez que se elimine o reduzca drásticamente cualquier especie.
Si bien, los mosquitos son principalmente vistos como una molestia y un factor de enfermedades mortales, tales como la malaria, podrían haber «efectos secundarios indeseables» al erradicarlos por completo, según informó el entomólogo de la Universidad de Florida, Phil Lounibos, Ph.D. para BBC News:
«… [Lounibos] indica que los mosquitos, los cuales en su mayoría se alimentan del néctar de plantas, son importantes polinizadores.
También, son una fuente de alimento para aves y murciélagos, mientras que sus crías –como las larvas- constituyen un alimento para los peces y ranas. Esto podría tener un efecto muy variable en la cadena alimenticia… Advierte que los mosquitos podrían ser reemplazados por un insecto ‘similar, o más, indeseable, desde el punto de vista de la salud pública’.
Incluso, su reemplazo podría propagar aún más enfermedades y más rápidamente, que los mosquitos actuales».
El Programa Mundial de Mosquitos opera bajo la premisa de que los mosquitos portadores de wolbachia son menos capaces de transmitir enfermedades a las personas. Al liberar mosquitos machos y hembras portadores de wolbachia, la idea es implantar la bacteria en toda la población de mosquitos, lo que según indican, podría ocurrir en unas cuantas generaciones.
Si bien, los mosquitos machos portadores de wolbachia y las hembras que no son portadoras, no pueden reproducirse exitosamente, los mosquitos machos y hembras que son portadores de wolbachia y se aparean, podrían producir crías que también porten la bacteria.
Además, cuando las hembras que son portadoras se aparean con machos que no lo son, su descendencia tendrá wolbachia. De acuerdo con el programa:
«[E]l método Wolbachia del Programa Mundial de Mosquitos es único porque es autosostenible y no necesita volver a aplicarse continuamente, por lo que es una solución asequible, autosustentable y a largo plazo.
Nuestro método reduce la capacidad de los mosquitos para transmitir el dengue, zika y chikungunya a las personas, sin suprimir las poblaciones de mosquitos ni afectar potencialmente a los ecosistemas. Hoy en día, hemos adaptado nuestro enfoque para aplicarlo en entornos urbanos grandes y con el objetivo de que tenga un costo de $ 1 dólar por persona».
También se contempla el uso de mosquitos de laboratorio
Asimismo, la empresa de biotecnología Oxitec ha creado y buscado liberar mosquitos de laboratorio en los Estados Unidos para combatir el virus del zika. Los mosquitos fueron diseñados genéticamente para portar un «interruptor genético de muerte», de modo que cuando se apareen con mosquitos hembras silvestres, sus descendientes heredarán el gen letal y no podrán sobrevivir.
Para lograr esta hazaña, Oxitec ha insertado en estos insectos fragmentos de proteínas del virus de herpes, bacteria E. coli, gusano de la col y del coral.
Los mosquitos de laboratorio han demostrado ser letales para las poblaciones de mosquitos nativas de las Islas Caimán y Brasil, pero como señaló el Dr. Peter Hotez–Decano de la Escuela Nacional de Medicina Tropical de la Facultad de Medicina Baylor, en Houston–para USA Today, los mosquitos de laboratorio no han demostrado reducir las tasas de enfermedades como el zika (como se mencionó, el virus del zika tampoco es tan común en los Estados Unidos).
Además, este tipo de mosquitos podrían ser muy costosos para las áreas plagadas de enfermedades transmitidas por mosquitos.
Asimismo, existe la posibilidad de que estos genes extraños, que se transportan de un lugar a otro, infecten la sangre humana al acceder por medio de heridas cutáneas o al inhalar polvo. Tal transmisión podría perjudicar el genoma humano, al crear «mutaciones de inserción», así como otro tipo de daño impredecible en el ADN.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos, que anteriormente analizaba los mosquitos de laboratorio, al principio declaró que estos no tendrían un impacto significativo en el medio ambiente, pero que, de acuerdo a los informes, estaba interesado en cómo se comportaría el «interruptor genético» en la naturaleza, y si podría afectar a los seres humanos u otros animales.
Posteriormente, en octubre de 2017, la FDA transfirió el poder de aprobación regulatoria a la EPA, después de aparentemente categorizar a los mosquitos de laboratorio como pesticidas, en vez de medicamentos para prevenir enfermedades.
Este tipo de mosquitos no se han liberado en los Estados Unidos –sin embargo– la FDA ha aprobado su liberación en los Cayos de la Florida, como parte de una prueba de 22 meses de duración pero, actualmente, esta se encuentra en espera, pendiente de notificación por parte de la EPA. No obstante, el cambio podría facilitar su eventual liberación. Wired informó que:
«El cambio de la supervisión de la FDA a la EPA significaría el fin de la interminable espera de Oxitec. Esto se debe a que la ley federal le exige a la EPA que revise los nuevos pesticidas «lo más rápidamente posible», ya que los estatutos establecen que debe hacerse en los siguientes 12 meses después de presentar una solicitud…
[Derric Nimmo, un científico de Oxitec que dirige la investigación de esta empresa en los Estados Unidos] Espera obtener permiso para continuar con la liberación en los próximos seis meses, justo a tiempo… [para la temporada de mosquitos de 2018]».
¿Qué tan grande es el problema de las enfermedades transmitidas por mosquitos en Estados Unidos?
En los Estados Unidos, hay una significativa presión para combatir las enfermedades transmitidas por mosquitos a nivel continental, con el uso de mosquitos transgénicos y creados en laboratorio.
Si bien, es evidente que algunas áreas alrededor del mundo tienen niveles epidémicos de enfermedades transmitidas por mosquitos, tales como la malaria; entre las cuales, actualmente, 91 países atraviesan por un proceso de propagación, ¿Será ese el caso de los Estados Unidos? Todo lo contrario. De acuerdo con los CDC:
- Dengue. «El dengue rara vez aparece en el área continental de los Estados Unidos».
- Chikungunya. Entre 2016 y 2017, «en los Estados Unidos, no se reportaron casos de trasmisión en áreas locales».
- Virus de la encefalitis equina del Este (EEEV). «En los seres humanos, es una enfermedad poco usual, y en los Estados Unidos, sólo se informan unos cuantos casos cada año».
- Virus del zika. En 2017, sólo se notificaron 4 casos (presumiblemente) de la enfermedad adquirida localmente.
Esto no significa que las amenazas para la salud debido a los mosquitos no deban tomarse en serio; a menudo se les han descrito como «los animales más mortíferos del planeta» y con razón.
Sin embargo, en los Estados Unidos, las enfermedades transmitidas por mosquitos no son una amenaza grave, en especial, si se comparan con otras grandes crisis de salud pública, tales como la epidemia de los opioides. Además, incluso si lo fueran, podría haber mejores métodos para combatirlos que implementar la cuestionable liberación de mosquitos transgénicos o creados en laboratorio.
Es importante recordar que, en los Estados Unidos, alguna vez hubo un brote de malaria, pero fue eliminado sin utilizar mosquitos «pesticidas». ¿Cómo ocurrió? Karl Tupper, de la Red de Acción de Plaguicidas (PAN) de Norteamérica, expuso en un comunicado de prensa:
«Lo que acabó con la malaria en los Estados Unidos, fue tener un mejor saneamiento, control ambiental y acceso a los servicios de atención médica…
De igual manera, otra clave fue elevar el nivel de vida -al proporcionar aditamentos, tales como ventanas con mosquiteros, en áreas rurales de los estados en el Sur de los Estados Unidos, donde había un problema más grave de malaria».
Por ahora, lo lógico sería evitar el pánico anterior hacia los mosquitos, como el observado con el fraude del zika y, en vez de liberar mosquitos modificados en el medio ambiente –con consecuencias, en gran parte desconocidas– tomar medidas prudentes para evitar las picaduras.
- Si sabe que estará al aire libre en un área propensa a mosquitos, debe utilizar mangas y pantalones largos y, si es necesario, repelentes para insectos de ingredientes naturales (y no versiones químicas artificiales), tales como el aceite de hoja de canela, aceite esencial de citronela o aceite de hierba gatera.
- Si los mosquitos le molestan en su jardín, podría recurrir a un ventilador para mantenerlos alejados mientras está en el exterior, al igual que sembrar estratégicamente plantas de caléndula, las cuales tienden a evitar los mosquitos.
- Asimismo, para ahuyentar a los mosquitos, es importante drenar el agua estancada, incluyendo los tazones de las mascotas, canaletas, botes de basura y de reciclaje, llantas de refacción, bebederos para aves, juguetes para niños, etc.
- Esos son ejemplos de lugares donde pueden reproducirse los mosquitos, por lo que, si elimina el agua estancada, evitará que se produzca una gran cantidad de ellos.
- Finalmente, le recomiendo instalar madrigueras para murciélagos, ya que los mosquitos son uno de sus alimentos favoritos.
