33.8 C
Mexico
jueves, abril 18, 2024

…Y marzo, otro poco

- Anuncio -

Durante muchos años, se consideró al Paseo de la Reforma, una de las vialidades más importantes de la Ciudad de México, como el peor negocio que había hecho el gobierno federal.

Construida en las postrimerías del Porfiriato, Paseo de la Reforma reunió todas las especificaciones requeridas para mantenerse como una de las vías mejor hechas para soportar tránsito vehicular que, en ese entonces, era incipiente, lo que contrasta con las nuevas vialidades que se construyen como negocio por encima de su finalidad propia y cuyo mejor ejemplo es la Autopista México-Acapulco, barril sin fondo, que siempre está en reparación, pese al diseño y las millonadas que costó.

La construcción adecuada en todos los sentidos puede verse también en los centenarios edificios del Centro Histórico de la Ciudad de México (CDMX) que han resistido todos los avatares que han pasado sobre ellos y se mantienen enhiestos y firmes, como cuando se levantaron.

No sucede lo mismo con las modernas edificaciones de cualquier tipo que sucumben ante alguna contingencia meteorológica, sin importar su magnitud.

En resumen, son deficiencias humanas, ligadas más a cuestiones monetarias que a los acontecimientos naturales, lo que ocasiona los percances que se viven en la actualidad.

Lo dice claramente la conseja popular: “Febrero loco y marzo, otro poco”. Así ha sido y lo será siempre.

No es la cercanía del fin del mundo, como pregonan los adoradores de la Biblia; tampoco es del todo culpa del fenómeno meteorológico El Niño, como apuntan ecologistas extremosos preocupados por estos hechos.

Son manifestaciones normales de la naturaleza que se magnifican por el crecimiento desordenado de las urbes.

Construir sobre barrancas, levantar edificios malhechos, hacer carreteras y caminos sin las especificaciones debidas, plantar árboles en forma inadecuada o especies no recomendables para ciertos sitios (los eucaliptos, por su misma constitución frágil, no se recomiendan para cualquier lugar), colocar espectaculares sin ton ni son, carentes de la fortaleza y cimentación necesarias y sólo por la ambición comercial, son ejemplos de esas necedades humanas.

La naturaleza sólo cumple con sus propias leyes que, por cierto, son inmutables y quienes las transgreden se atenderán a las consecuencias.

No debe olvidarse que hace poco más de una década, el día de la Primavera se presentó con fuerte nevada en la ciudad de Oaxaca, una de las urbes donde la temperatura tiende a ser más caliente que fría, durante todo el año.
Marzo ha sorprendido a muchos, más que febrero. Sus locuras siguen estando presentes.

Frío extremoso con heladas, nevadas y granizadas, en el norte; tormentas pluviales con rayos, granizo y vientos huracanados en el sur y sureste; bajas temperaturas con nevadas en zonas montañosas, lluvia y fuertes vientos en el centro del país, son las constantes que presenta el Meteorológico nacional (SMN), en estos días.

De todo, como en botica, podría ser el resumen del “marzo, otro poco”, a sólo unos cuantos días de que entre la Primavera.

Después aparecerán las altas temperaturas que ya se resienten en varias regiones del territorio nacional.

Como siempre, la naturaleza cumple sus propias leyes; el ser humano se empeña en transgredirlas.

Los resultados están a la vista de todos.

- Anuncio -

Últimas Noticias

- Anuncio -

Artículos Relacionados

- Anuncio -

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí