Las palmeras datileras florecen en Jericó, gracias a un proyecto estadounidense y japonés para limpiar las aguas residuales y promover empleos en Cisjordania y Gaza.
La Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid) anunció el 15 de octubre una inversión de 10 millones de dólares para aumentar el acceso de los palestinos al agua agrícola mediante la expansión del sistema de recolección de aguas residuales de Jericó a 10,000 residentes adicionales. Japón construyó la planta de tratamiento de aguas residuales en Jericó en 2014.
Las nuevas líneas de agua construidas por Estados Unidos conectarán al 70 por ciento de los residentes de Jericó con una planta de tratamiento de última generación, donde las aguas residuales serán tratadas y recicladas para la irrigación agrícola.
Hasta ahora, cada gota de agua producida por esta instalación ha sido reutilizada por las granjas locales, según el cónsul general en Jerusalén, Donald Blome, quien dijo haber conocido a agricultores cuyas vidas se han transformado debido al agua limpia que reciben de la planta de Jericó. Las prósperas hileras de palmeras datileras han creado empleos y han traído ingresos a las familias palestinas, dijo mientras estaba en Jericó para lanzar la expansión.
Cada año, millones de litros de aguas residuales no tratadas fluyen a Israel, Cisjordania y Gaza, lo que pone en peligro el medioambiente y la salud de las personas. “El agua contaminada es la principal causa de enfermedad y enfermedades entre los niños de Gaza”, dijo Jason Greenblatt, representante especial del presidente para negociaciones internacionales. Greenblatt habló después de una reunión patrocinada por Estados Unidos con funcionarios israelíes y de la Autoridad Palestina en septiembre. “Piense en eso por un momento. Los padres en Gaza ni siquiera pueden darles a sus hijos un trago de agua sin exponerlos a riesgos significativos”.
Es por eso que “Estados Unidos espera con interés trabajar con líderes internacionales en el tratamiento de aguas residuales para garantizar que esta iniciativa sea un éxito”, dijo Greenblatt. “Juntos, podemos hacer de este un modelo de cooperación entre israelíes, palestinos y la comunidad de donantes y aplicarlo a otras áreas para el beneficio de todos”, dijo.
Medidas positivas adicionales
Israel y la Autoridad Palestina también dieron un paso importante en julio para completar un histórico proyecto de desalinización que proporcionará agua dulce a la región y restaurará los niveles de agua del mar Muerto. Israel es un líder mundial en tecnología hídrica y exporta sus técnicas de irrigación a todo el mundo.
Además, Israel y la Autoridad Palestina acordaron en julio un pacto de electricidad, por medio del cual Israel transfirió la responsabilidad de una nueva subestación eléctrica fuera de la ciudad cisjordana de Yenín a la Autoridad Palestina.
Greenblatt reconoce que el cambio transformacional no será fácil, y que ambas partes tendrán que hacer sacrificios para lograrlo. “Pero estos son el tipo de medidas que, si se implementan, podrían crear un entorno que permita avanzar a las negociaciones de paz”.
“Lograr la paz entre israelíes y palestinos sigue siendo una de las principales prioridades del presidente”, dijo.
