Lexington, Ky.- El Día Mundial del Suelo se celebra en varios países el 5 de diciembre para aumentar la conciencia sobre la importancia de la preservación del suelo y estimular el debate sobre las prácticas efectivas de cultivo. Estos debates rápidamente se convierten en un llamado a la acción. Muchos productores buscan disminuir los daños causados por prácticas de manejo ineficientes y, posteriormente, mejorar los resultados de los cultivos mediante un balance en la microbiología del suelo.
Prácticas agrícolas más naturales combinadas con la ciencia moderna pueden ayudar a aumentar la diversidad en la biología del suelo. Steven Borst, gerente general de Alltech Crop Science, enfatiza la importancia de integrar las tecnologías biológicas en los programas de manejo existentes para alimentar el suelo.
“Tenemos que trabajar con la naturaleza, no en contra de ella, para cultivar no sólo nuestras cosechas, sino también nuestro suelo”, dijo Borst.
Una mejor calidad del suelo que sea parte de un agribioma saludable puede aumentar la salud de las plantas y, a su vez, disminuir potencialmente la cantidad de productos químicos sintéticos necesarios para combatir el estrés y la enfermedad. Los resultados incluyen una mayor calidad y productividad.
En todo el mundo, cada generación de agricultores se preocupa por el legado que dejará. En Texas, Mike Helle, un productor que ha estado utilizando productos biológicos para mejorar la salud del suelo, sabe que años de prácticas convencionales han disminuido los microbios naturales y quiere ser el mejor administrador de su granja. En Brasil, Silvia Nishikawa está aprendiendo a repoblar el suelo de su finca con microorganismos beneficiosos para tener algo que dejar a sus hijos.
“Para el agricultor es importante comprender el delicado equilibrio en el sistema suelo-planta y la correlación entre los dos”, dijo Borst.
La base para plantas más saludables y productivas son suelos ricos en nutrientes y prácticas de manejo que continúen mejorando el suelo en cada temporada.
