El árbol “ramón” (Brosimum alicastrum Swartz) o capomo, como le llaman en el norte de México, es una especie forestal que aparece como una de las mejores opciones para la alimentación humana y pecuaria, actualmente.
De acuerdo a información del Centro de Investigación Científica y Tecnológica (Cicyt), en el Parque Científico y Tecnológico de Mérida, Yucatán, se realizó en diciembre último, el encuentro “El sector forestal en apoyo a la cruzada contra el hambre y el cambio climático”, en el que, a partir de rigurosos estudios científicos, se mostraron las bondades del Brosimum alicastrum, mejor conocido como “árbol ramón”, buscando que se consolide como una nueva alternativa en México para aminorar los problemas alimentarios y de impacto ambiental.
Como resultado del encuentro, algunas empresas se han sumado a este proyecto, entre ellas Kishur, que desde febrero de este año, se consolidó como una Sociedad de Producción Rural en el municipio de Chocholá, Yucatán.
Ramón Gómez Ramírez, uno de los ocho socios con los que cuenta la compañía, dijo que “el Foro Consultivo fue el que nos abrió el panorama respecto a confirmar el interés que previamente teníamos en el proyecto del árbol ramón; nosotros llevábamos aproximadamente dos años de trabajo y apenas acabamos de constituirnos formalmente”.
Kishur trabaja en un programa piloto con la asesoría del Centro de Investigación Científica de Yucatán (Cicy) y de Alfonso Larqué Saavedra, con quien se ha establecido un plan de trabajo para 2016 que contempla la siembra de 27 mil árboles ramón en 42 hectáreas de terreno y un vivero que permitirá producir un millón de plantas para finales de este año para que, en coordinación con las instancias gubernamentales, se pueda reforestar una parte de la Península de Yucatán.
Durante la octava edición de “Expocampo Yucatán 2016”, inaugurada el pasado 4 de este mes, Kishur presentó su línea de productos que tiene como base la semilla que produce el árbol ramón, como la harina proveniente del capomo, y probaron mazapanes, tamales, galletas, té, agua, tortillas, gelatinas y pan dulce, elaborados con ella; también degustaron conejo criado con la hoja del árbol.
Gómez Ramírez comentó que a finales del 2015 se instaló durante tres semanas un centro de acopio en Chocholá, en el que se concentró más de tonelada y media de la semilla del capomo, lo que les permitió utilizarla tanto para la línea de producción alimenticia como para crear su vivero.
Hasta el momento, tiene unas 7 mil 500 plantas de entre 20 y 25 centímetros de altura, listas para ser sembradas en terreno.
Aclaró que Kishur será la primera empresa que hará un sembradío de ramón con la asesoría del Cicy. “Anteriormente, la gente ha intentado hacer plantaciones de capomo para explotar su hoja y semilla, sin embargo, no han obtenido los resultados deseados porque trabajan a través de prueba y error, lo que hace que se eleven los tiempos y costos”.
Gómez Ramírez, graduado en Finanzas del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, narró que los socios de Kishur han convivido muy cerca con las comunidades yucatecas y han sido testigos de la gran marginación en la que vive una gran parte de la población en este estado.
“Hay gente que está subsistiendo con base en lo que produce para autoconsumo; es muy triste ver que existen niños desnutridos, ancianos que están muriendo porque no tienen una atención adecuada y que los recursos están ahí muchas veces desperdiciándose”, comentó.
Por ello, Kishur se ha propuesto que la mujer sea la protagonista principal de este proyecto, al contratar a 15 jefas de familia de la comunidad de Chocholá para que mejoren su situación económica.
“Se ha decidido trabajar con mujeres por varias razones, entre ellas, porque la mujer yucateca se ha distinguido por ser muy trabajadora y emprendedora, al mismo tiempo que es ordenada y empeñosa, por lo que cumple una labor trascendental en Kishur”, dijo.
“Los empresarios en México tienen que dejar de ser personas que sólo ponen capital, tienen que hacer un esfuerzo por entender los procesos y las consecuencias medioambientales y de impacto social de sus acciones; de esta manera, se puede crear una mayor conciencia para que se tomen mejores decisiones para este país”, expuso, al hacer referencia que la tierra ha sido sobrexplotada en todos los aspectos.
